«El mayor problema es la distancia entre la realidad del rural y Puertochico»
Este pasado sábado, 9 de marzo, se desarrolló en Tezanos una jornada sobre el fuego en los montes de Cantabria, tal y como informó EL FARADIO, organizada por Cantabria No Se Vende (CNSV).
La jornada comenzó con una visita por la mañana a unos productores locales de ‘En ecológico’, una granja ubicada en Tezanos. «Visitamos las cuadras, vimos el ganado que tienen que pastorean suelto la mayor parte del día. Y como ellos mismos producen yogures, quesos y mantequilla; siguiendo la tradición pasiega de transformación de los lácteos», asegura uno de los miembros de CNSV, Diegu San Gabriel.
Tras eso, comenzaron una ruta por el monte, con el objetivo de ver alguno de los destrozos que han azotado la zona. «El contraste era altísimo, entre el verde pasiego fuerte y característico y los fuegos».
Después de la ruta, se bajó a Selaya, donde almorzaron en una comida conjunta. A la hora de la reunión, el salón de plenos se quedó pequeño para las 60 personas que acudieron a la mesa redonda. «La idea era hacer una mesa redonda sobre sobre el fuego contando con todas las voces, invitamos a representantes conservacionistas, representantes ganaderos, representante del ámbito científico, e invitamos también a la administración, tanto a la consejería de medio rural como a la dirección general de medio natural, así como a ayuntamientos y juntas vecinales cercanas», asegura San Gabriel. Aunque, desde la administración finalmente declinaron asistir al evento, aseguran desde la organización.
«Mas o menos había una especie de acuerdo en torno a la cuestión del fuego, de que en ningún caso puede seguir así, hay que cambiar», añade.
Y advierte de que «quizá el mayor problema es la distancia que existe entre la realidad del rural cántabro y Puertochico, que no es la distancia que hay en kilómetros, es un abismo, porque es que no se entienden muchísimas cosas.»
En el encuentro se trataron tendencias como que el fuego ha sido tradicionalmente usado como una herramienta para el paisaje, pero se ha criticado que se le provoque «de forma descontrolada», como está ocurriendo hasta ahora, por lo que hay que canalizar esa cuestión.
«Hay que ordenar el territorio de forma que en Cantabria tiene que haber desarrollo forestal, tiene que haber también zonas de argumas y de arbusto, de bosque y sotobosque, y tiene que haber también zonas de pasto, y hay que desarrollar el orden al territorio», reclama San Gabriel.
Los bomberos asistentes comentaron los daños y consecuencias y, especialmente, acerca del uso del fuego, como hacerlo correctamente y evitar problemas. Lamentablemente, para eso se necesita que haya comunicación entre todas las partes y, durante este evento, no la hubo por parte de la administración.
Haciendo alusión al cambio climático, se habló de las consecuencias que ello puede traer y se considera que, de momento, en ese aspecto, se está teniendo incluso suerte, pero cualquier día puede puede ocurrir una catástrofe de primer nivel.
«Esto ya no puede esperar más a ser atajado o a cambios en la política de Cantabria, tienen que hacerse y partir de la realidad de los pueblos y de hablar con la gente de los pueblos porque no hay otra manera», inciden.
SESENTA VOLUNTARIOS DE FNYH RESTAURAN LO QUEMADO EN LA REFORESTACIÓN DE VALCABA
La última oleada de incendios que ha arrasado Cantabria se llevó por delante bosques adultos, zonas de matorral… y también una reforestación joven con arbolado autóctono que Fundación Naturaleza y Hombre (FNYH) había llevado a cabo en el paraje de los Pozos de Valcaba, en Pámanes (Liérganes), y que formaba parte de la red de espacios naturales del proyecto LIFE ‘Anillo Verde de la Bahía de Santander’.
Por eso, y para restaurar lo perdido, Fundación Naturaleza y Hombre convocó una jornada de voluntariado a la que acudieron 60 personas (la gran cantidad de solicitudes obligó a cerrar las inscripciones), que en el transcurso de una mañana plantaron cerca de 400 ejemplares de madroños, laureles, encinas y endrinos.
Con esta acción, se recupera una repoblación que la organización había llevado a cabo previamente en el lugar y que formaba parte de las acciones que el proyecto LIFE Anillo Verde de la Bahía de Santander lleva a cabo para dotar a los municipios en torno a la bahía de una red de espacios verdes en zonas degradadas pero de gran valor ecológico.
Los participantes pudieron conocer las dos lagunas de origen minero que dan nombre al lugar, en la ladera sur de Peña Cabarga, así como las consecuencias que los últimos fuegos han tenido en el mismo, con 25 h de encinar y monte bajo arrasados, según estimaciones de la presidenta de la Junta Vecinal de Pámanes, Ana Ríos.
El proyecto LIFE ‘Anillo Verde de la Bahía de Santander’, dentro del que se gestiona la conservación medioambiental de los Pozos de Valcaba, está coordinado por Fundación Naturaleza y Hombre en asociación con la empresa pública MARE y cuenta con la cofinanciación de la Unión Europea, la Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria y el apoyo de Fundación Biodiversidad, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica.
COLECTIVOS CÁNTABROS LIBERARÁN DE BASURALEZA EL ARROYO DE SÁMANO Y LA RÍA DEL PAS
A esta acción de resforestación y conservación se unirá la que ha organizado SEO/Birdlife a través del proyecto LIBERA, que lleva a cabo en alianza con Ecoembes.
Este jueves, 14 de marzo, tendrá lugar la segunda edición de ‘1m2 por los ríos, embalses y pantanos’, campaña de ciencia ciudadana destinada a la recogida y caracterización de basura en los entornos fluviales. En esta ocasión, la iniciativa se extiende hasta el 17 de marzo y cuenta con la participación de cerca de 160 colectivos, entre los que se encuentran ayuntamientos, asociaciones locales, centros de interpretación o colegios, para recoger información sobre la basuraleza de 157 puntos en todo el país.
Los puntos establecidos en Cantabria se encuentran en el Arroyo de Sámano (16 de marzo) y la ría del Pas en Mogro (17 de marzo).
El objetivo de la campaña de ciencia ciudadana es obtener el mayor número de datos posible para conocer la cantidad, el volumen y la tipología de la basura que se deposita en ríos, embalses y pantanos. La información que se obtenga de estas recogidas se utilizará para llevar a cabo campañas más efectivas que ayuden a acabar con la basuraleza en un futuro.
Los participantes han recibido una formación previa para conocer el funcionamiento de la caracterización de residuos abandonados. Los datos se obtienen a través de la app ‘e-Litter’, una herramienta de trabajo pionera, desarrollada por las asociaciones Paisaje Limpio y Vertidos Cero en colaboración con LIBERA, que permite cuantificar y clasificar los residuos encontrados para posteriormente integrarse en la base de datos del Ministerio para la Transición Ecológica (MITECO).
IMPACTO DE LA BASURALEZA
Por el momento, se estima que un 17% de las especies afectadas por la basuraleza forma parte de la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Un reciente estudio calcula que el 90% de las aves marinas han ingerido plástico y que, de seguir así, el número llegará al 99% en 2050.
Los estudios en entornos terrestres son significativamente inferiores a los realizados en el mar, por lo que es necesario hacer un mayor esfuerzo investigador. Ya existen análisis que sugieren que el impacto de la basuraleza terrestre podría ser mayor que la de los océanos. No en vano, la mayor parte de los residuos que acaban en el océano provienen de tierra firme.