El partido ecologista Equo ha arremetido este martes contra el proyecto del puerto deportivo de San Vicente de la Barquera, cuyas obras ha adjudicado el Gobierno, que ha anunciado que comenzarán a mediados de octubre.

En su opinión, el proyecto será “otra chapuza sin sentido similar al puerto deportivo de Laredo donde solo unos pocos (¿amigos?) han salido beneficiados” pero que, insisten, “para las arcas públicas fue un desastre”.

Puerto Deportivo de San Vicente de la Barquera.

“Revilla y su Gobierno siguen en un mundo de fantasía donde el crecimiento económico sin límites es el pan de cada día”, critican en una nota de prensa en la que lamentan la poca visión del Ejecutivo.

“El señor Revilla cada vez que puede defiende la ecología y se le llena la boca de cuidar del campo, de los montes, de los ríos y del mar pero, mientras con una mano apunta en esa dirección, con la otra apoya proyectos como el que mencionamos y que son un despilfarro de dinero público que se gasta solo porque el Gobierno PRC y PSOE se han creído la tontería irresponsable que el gastar por gastar es bueno para Cantabria”, continúa el comunicado.

Equo resalta que el puerto deportivo de San Vicente de la Barquera se va a ubicar en el Lugar de Interés Comunitario, protegido por la directiva hábitats al ser un espacio costero vulnerable por las construcciones y la fuerte presión turística, siendo además un punto de interés geológico.

“Esa manera de actuar es la causa por la que se derrite Groenlandia, arde la Amazonía, y tenemos un clima cada vez más inestable y extremo”, critica el partido verde, que ha puesto en valor las iniciativas de la Plataforma Contra el Superpuerto Deportivo y Ecologistas en Acción que c,on su recurso contencioso, han logrado retrasar el comienzo de las obras.

“La economía del crecimiento infinito no existe sin una explotación de los recursos naturales de forma infinita, pero vivimos en un planeta con recursos finitos”, insisten, pidiéndole a Revilla que escuche a las asociaciones jóvenes como Friday For Future.

“Debemos dejar de mirarnos al ombligo y pensar en el futuro de Cantabria y no solo durante cuatro años. Hay que pensar en todos y no solo en unos pocos empresarios que sacan provecho del dinero público”, finalizan.