PRC: “Somos alguien en España”
José María Mazón concurre a estas elecciones con el deseo no sólo de revalidar el histórico escaño que logró para el PRC en la primera convocatoria, sino con el deseo de sentirse un poco menos solo, es decir, de llegar hasta los dos diputados que le daba su propia encuesta interna.
“Estamos muy cerca. Estamos en el segundo diputado, con toda seguridad”, manifestaba el que fuera consejero de Obras Públicas y Vivienda entrevistado en EL FARADIO de ARCO FM (103.2 FM).
Y lo hace confiado en que “la gente en abril podía tener dudas de que su voto fuera útil”, pero ahora los cántabros “tienen más seguridad de que conseguimos resultados”.
Entre ellos, en el balance de la breve legislatura en la que pactó con el PSOE la finalmente frustrada investidura, como la adjudicación –en plena campaña—del estudio informativo del tren a Bilbao, las expropiaciones en Alar del Rey o la licitación del enlace de Cantabria con la Autovía de la Meseta.
Es un “balance muy positivo” porque “se nos ha visto” que “somos alguien en España”, manifestaba el candidato regionalista, convencido de que “si no estuviéramos en el Congreso, eso no estaría”.
“NUESTRO SOCIO PREFERENTE ES CANTABRIA”
Un Mazón que combinaba la ambigüedad regionalista a la hora de elegir socios (“no tenemos socios preferentes, nuestro socio preferente es Cantabria”), con una defensa de su “posición progresista” y “sin etiquetas”.
Así, el requisito para los pactos es “primero Cantabria y luego la gobernabilidad de España”, abogando por “leer los resultados” a partir del domingo. Y con el criterio de que el PRC en realidad “sólo va a negociar con el candidato que tiene posibilidades, el que proponga el rey”, o sea, o Sánchez o Casado. Así que rechaza que vaya a sentarse con Vox, con quien no se ve cerca en cuestiones como su visión de las autonomías o la “barbaridad” de pedir ilegalizar partidos.
El cabeza de lista al Congreso esgrimía su visión de la necesidad de “cada vez más colchón social” al detectar que “cada vez hay más desigualdad”, de ayudar a las “personas que más lo necesitan” en cuestiones como la dependencia, o de defender los derechos LGTBI o la vivienda (aspectos cuyos incumplimientos le vienen reprochando en Cantabria colectivos como ALEGA o la PAH).
En vivienda, Mazón, que en su época de consejero ostentó las competencias en vivienda y situaciones de emergencia habitacional, se ha mostrado en contra de “los okupas”, pero luego ha matizado que no considera bajo esa denominación a las familias que entran en sus viviendas de toda la vida una vez que se ha hecho con ellas un banco (caso de Liberbank, una de las situaciones más frecuentes en los últimos meses).
El candidato regionalista también desplegaba su visión de la política económica, en la que aboga por ser “realistas”: no es partidario de reducir impuestos “drásticamente”, sino de bajarlos “paulatinamente” cuando la economía crezca y siempre de una forma que permita cubrir los gastos, especialmente los sociales. Aunque su principal receta económica pasa por que el Estado compense sus deudas: “si el Estado paga lo que nos debe, la economía de Cantabria mejorará”.
Finalmente, Mazón, un candidato que ha echado en falta más presencia en medios nacionales (al ceñirse el criterio a la existencia de grupos parlamentarios y estar ellos en el Mixto, compartido), revelaba que el PNV no quiso reunirse en campaña con Revilla para hablar del AVE a Bilbao porque “no lo veía” por “temas electorales”.