El Ayuntamiento de Piélagos ha nombrado este viernes, a título póstumo, al ex consejero de Presidencia y ex presidente del Parlamento Cantabria, Rafael de la Sierra, como Hijo Predilecto del Real Valle de Piélagos.

Lo ha hecho en el transcurso de un acto, celebrado en el Teatro Vimenor de Vioño, presidido por la alcaldesa del municipio, Verónica Samperio, que ha contado con la participación de la familia del político regionalista, fallecido el pasado 19 de junio; de la consejera de Presidencia, Paula Fernández, y del presidente regional, Miguel Ángel Revilla.

A la ceremonia han asistido también amigos y vecinos de Rafael de la Sierra; miembros de la Corporación municipal; el presidente del Parlamento de Cantabria, Joaquín Gómez; el delegado del Gobierno, Eduardo Echevarría; el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria, José Luis López del Moral; la fiscal superior, Pilar Jiménez, regidores municipales de otros ayuntamientos y diputados del Parlamento de Cantabria, entre otros.

El acto comenzaba con la lectura, por parte del secretario municipal del Ayuntamiento de Piélagos, del acuerdo plenario del pasado 4 de octubre, por el que la Corporación municipal acordó, por unanimidad, la concesión del título de Hijo Predilecto del Real Valle de Piélagos a Rafael de la Sierra.

UN SEÑOR DE LA POLÍTICA y DE LA VIDA

A continuación, la alcaldesa de Piélagos ha dado la bienvenida a los asistentes a un acto que, según ha dicho “no entiende de ideologías ni de colores y sale del corazón”, al tiempo que ha asegurado que “es de justicia, por nuestra parte, agradecer a quien tantas cosas nos dio”.

Samperio, quien ha reconocido la dificultad de resumir en unas pocas palabras la figura de Rafael de la Sierra, ha afirmado de él “se ha dicho todo y siempre bueno”.

No obstante, ha aprovechado el lema de los dos grandes carteles colocados a ambos lados del escenario, en los que podía verse una fotografía del político regionalista y la leyenda ‘razón y corazón’, para enumerar algunos de los rasgos de “una persona carismática”, que atraía y ha sido reconocida por compañeros de partido y adversarios políticos, quienes todos, sin excepción, le señalan como “un hombre de consenso”.

Durante su intervención, ha resaltado algunas virtudes de Rafael de la Sierra, entre ellas, “su facilidad para propiciar el diálogo y el entendimiento; su habilidad innata para sumar, nunca restar; para defender sus ideas con esa dosis justa de pasión y moderación”.

“Fue un hombre reflexivo y, a la vez resolutivo; un hombre regionalista, en el sentido más noble de la palabra, leal a sus principios e ideales; reformista, ya que entendía la política como un servicio a la ciudanía y sabedor de que los cambios se garantizan desde los consensos”, ha enfatizado la regidora municipal.

Samperio ha aseverado que, “en estos tiempos tan convulsos que vivimos, su legado, su propia forma de entender y vivir la política, creo que es más necesaria que nunca”. “¿Señor de la política? Sí; ¿Señor en la vida? Más si cabe”, ha apostillado la alcaldesa de Piélagos.

“LO ÚNICO QUE NO NOS ENSEÑASTE ES A VIVIR SIN TI”

Por su parte, la sucesora de De la Sierra en el cargo, Paula Fernández, le ha definido como “una de esas personas que llegaba a las vísceras de cada uno”.

“Con su cultura, con su amabilidad,  con sus valores, mucho antes que político era persona”, ha asegurado la que fuera su compañera de partido, quien ha añadido que “era ejemplo y practicaba con él, ya que tenía la virtud, no demasiado frecuente en política de que, además, de sumar no restaba a nadie, era querido y respetado por todos”.

La consejera de Presidencia ha subrayado que “Rafa, tanto en la vida, como en la política, era un capitán que escondía su brazalete, para ser uno más en el campo” y es que, según ha dicho, “en su escuela se impartían valores como la serenidad, la prudencia y la firmeza en la toma de las decisiones”. “Lo único que no nos enseñaste es a vivir sin ti”, ha apuntado.

A petición de la familia, Paula Fernández ha leído en su nombre un texto sobre “un Rafa muy familiar”, con muchas referencias al “niño curioso, aplicado y sociable”, nacido en Vioño, que “fue transformándose en un joven comprometido, emprendedor y atento a su entorno”; muy orgulloso de una familia con orígenes en Trasmiera, Escalante y Mataporquera, que tuvo en Piélagos “su lugar de referencia”.

Verónica Samperio y Paula Fernández, acompañadas por Miguel Ángel Revilla, han entregado a la mujer y las hijas de Rafael de la Sierra una placa conmemorativa, un ramo de flores y un diploma del Ayuntamiento “en reconocimiento a sus excepcionales méritos, así como por sus relevantes servicios a favor de Piélagos y de Cantabria”.

“CUÁNTO TE ECHO DE MENOS TODOS LOS DÍAS”

A continuación, un emocionado Miguel Ángel Revilla ha tratado de explicar lo que Rafael de la Sierra ha significado y ha sido para él, tras 43 años el uno al lado el otro. “Yo creo que, aparte, de Mari Carmen, de Susana, de Silvia y de su hermano, sin duda, el que más le conocía era yo porque era el que más horas ha pasado con él”, ha matizado.

El presidente regional ha subrayado que “éramos un complemento absoluto”, tan “unidos en lo fundamental” y, sin embargo, “tan dispares” porque “era todo lo contrario a lo que soy yo, un hombre tímido, al que no gustaba nada la notoriedad”.

Miguel Revilla, quien ha defendido que “en política, hacer amigos es casi imposible”, ha hecho hincapié en que, por el contrario, “lo que Rafa es lo hemos visto después de su muerte” ya que, según ha dicho, “por allí ha desfilado todo el mundo”.

El presidente regional también ha tenido palabras de agradecimiento para el Ayuntamiento de Piélagos que, por unanimidad, ha concedido esta distinción a un hombre “significado y artífice de otro partido político”.

“Qué lujazo tener a este Hijo Predilecto”, ha enfatizado Miguel Ángel Revilla, quien se ha mostrado convencido de que jamás nadie pedirá al Consistorio que le quite ese título porque “era tan buena gente y querido que será para siempre”. “Era un hombre tan bueno, tan bueno, que le queríamos todo, cuánto te echo de menos todos los días”, ha concluido.

La agrupación coral Amigos del Mar del Barrio Pesquero de Santander, que ha amenizado la ceremonia, ha sido la encargada de cerrar el acto cantando el Himno de Cantabria.