Los principales sindicatos elevan a 3000 o 3500 afectados por los ERTEs en Cantabria en lo que va de año, sin contar despidos. Son datos que maneja la federación de UGT, que contrastan con la estadística del Gobierno de Cantabria, que de enero a noviembre ha contabilizado 665 puestos de trabajo regulados temporalmente (suspendidos o reducidos) por 145 expedientes de extinción de empleo.

En estas cifras, facilitadas por la dirección de Trabajo a EL FARADIO, no están contabilizados los cuatro últimos expedientes presentados, entre los que está SEG AUTOMOTIVE (antigua Bosch, en Treto), que se están negociando. Ni los de las dos últimas grandes empresas que han trascendencido: GSW Nueva Montaña y Ferroatlántica.

En contacto con los principales sindicatos, señalan dos factores principales de la involución del empleo en la industria de Cantabria: las incertidumbres en el sector del automóvil, tanto en la producción como en las decisiones de compra, por una falta de concreción de fechas para la entrada en vigor de nuevas regulaciones o de la rentabilidad de novedades tecnológicas (coches eléctricos, por ejemplo).

Los datos del Ministerio de Industria reflejan una situación de desaceleración del empleo en la industria manufacturera cántabra, comparada con otros sectores y también con otras comunidades autónomas.

Ángel Garrido, analista de datos de EL FARADIO, apunta que en el promedio enero-noviembre los afiliados medios asalariados al régimen general de la Seguridad Social se han estancado con respecto a 2018, con una variación del 0%, frente a un crecimiento del empleo total del 2,4%.

Datos del Ministerio de Trabajo elaborados por Ángel Garrido

Sólo el sector de las actividades financieras y los seguros y el de las organizaciones extraterritoriales tuvieron un peor comportamiento que el de las manufacturas.

Por contra, las industrias extractivas, la construcción y las actividades inmobiliarias, las actividades culturales y de entretenimiento, las de información o comunicación o las actividades santitarias y de servicios sociales tuvieron el mejor comportamiento en términos de empleo.

Por comunidades autónomas, Cantabria se sitúa también a la cola en términos de crecimiento asalariado en el sector de las manufacturas en lo que va de año 2019, junto al País Vasco y Asturias, en contraste con el impulso del 2,3% observado en esta rama industrial en el conjunto nacional.

Datos del Ministerio de Trabajo elaborados por Ángel Garrido para EL FARADIO

EL TEMA DE LOS COSTES ENERGÉTICOS: CASO FERROATLÁNTICA

Con el último ERTE sobre la mesa, los sindicatos apuntan a los costes energéticos de la fábrica, que es electrointensiva y se ve afectada por un recorte en las subvenciones por la interrumpibilidad del servicio.

¿Qué es esto de la interrumpibilidad o in-interrumpibilidad (además de un trabalenguas)? Pues básicamente que hay momentos de mayor demanda de lo que se produce, en las que Red Eléctrica puede pedir una parada a estas fábricas para abastecer al resto de la población.

Son costes que el Estado compensa con subvenciones, pero subvenciones que se han recortado, como señala Daniel San Miguel, secretario de la Federación de Industria de CC.OO, mientras que Luis Díez, de UGT, habla incluso de que se está generando una «competencia desleal» en el precio de la energía con respecto a otros países del entorno.

EQUO CUESTIONA QUE LA ENERGÍA SEA EL MOTIVO

Sin embargo, Gabriel Moreno, socio de Solabria y coportavoz de Equo, alude a la responsabilidad de la empresa, que además (Grupo Villar Mir) es productora y comercializadora de energía, por lo que «no le tiene que ser muy difícil pagar la energía más barata del mercado». «Igual lo que hay que hacer es darle la vuelta al discurso y que invierta en energía renovable, que es lo que abaratará el coste de la energía porque no emite CO2, en una empresa que no ha invertido en fotovoltaica como sí han hecho otras».

Así lo asevera en declaraciones a EL FARADIO, al tiempo que recuerda que hay subvenciones de la Consejería de Industria para apostar por energías renovables, y que de una línea de 1,5 millones de euros en 2019 han sobrado, no se han adjudicado, más de 600.000 euros.

Ayudas que se podrían duplicar hasta 3 millones de euros, si fuera cofinanciado con fondos FEDER, fondos europeos, por lo que «fórmulas existen», aunque «fácil no es».

Por otra parte, respecto a la interrumpibilidad de la energía (parada obligada por necesidades de demanda), recuerda que estas empresas «cobran bastante dinero» en este concepto, una cifra que se eleva a más de 1.000 millones en 2018 en forma de subvenciones, que «luego se reflejan en nuestras facturas de la luz».

Además, subraya  que «son situaciones muy excepcionales – un par de veces en un año, en 2018-, por lo que considera que «una empresa como Ferroatlántica no puede ser tan dependiente de una ayuda externa (del Estado)».

De esta manera, apunta que con una instalación de fotovoltaica de autoconsumo podría abaratar su factura eléctrica, al consumir la energía que produce y disminuir la que paga y las tensiones de CO2, lo que «indirectamente disminuye el coste energético del pool».

LA INDUSTRIA DEL AUTO

Más allá del tema energético, y al margen de las facilidades de la reforma laboral, hay otro factor principal detrás del incremento de los ERTEs en Cantabria: la industria del ‘auto’, y ahí entran las situaciones de SEG Automotive o de la Global, manufactureras de la industria auxiliar del automovil.

Además, los sindicatos apuntan también otro problema a corto plazo, las contratas, las empresas pequeñas que trabajan para las grandes industrias, donde los trabajadores tienen menos poder de negociación.

Desde CC.OO., Daniel San Miguel espera que los ERTEs en estas dos empresas sea «un tema coyuntural», y «cuando tire el sector del auto volvamos a estar situados en el ‘top'», aunque para eso señala imprescindible que las empresas «hagan las inversiones necesarias».

Por su parte Luis Díez (UGT) apunta que «tiene que haber un cambio profundo en el futuro de la inversión, de los coches y de la energía», que además «tiene que ir acompañado de unas medidas». «Se esperan un año y medio o dos años difíciles en estos sectores», advierte.

Este miércoles se esperan reacciones tras la reunión del consejero de Industria, Francisco Martín, con el cluster GIRA de las empresas dedicadas al sector de la automoción en Cantabria.

Y el viernes en la Universidad de Cantanbria, a las 18.30 horas en la Escuela de Industriales, charla-coloquio ‘El sector de la automoción en Cantabria’, con Celia Monsalve, de GIRA.

Con estos problemas de fondo, la consejera nacional del CES, exsecretaria de UGT en Cantabria, María Jesús Cedrún,en la tertulia de EL FARADIO, subrayaba la cantidad de tiempo que se pierde lanzando señuelos para alimentar las esperanzas de la industria en Cantabria, en referencia a proyectos como la mina de zinc o el polígono de la pasiega.