Este viernes 20 de diciembre a partir de las 17:30 la autora cántabra Laura Ruiz Rivas visitará la biblioteca Municipal «Jacinta Vallejo» de Miengo en compañía de su perra de terapia.

Allí Ruiz Rivas presentará su libro ‘Pequeño, gran amigo’,  y en él se aborda la figura del perro, no sómo como compañía, sino su forma de comunicarse. Sobre todo, se contarán historias «emocionantes» de perros «muy especiales».

Además, se realizarán actividades para todos los públicos.

Al finalizar la actividad, se entregarán los premios del concurso de relatos cortos navideños convocado por el ayuntamiento.

Laura Ruiz Rivas es psicóloga y escritora, trabajo por el cual ha recibido numerosos premios literarios.  En el ámbito científico, ha publicado libros y material didáctico en torno a la Educación en Valores, Psicología y Discapacidad.

Ha sido galardonada en el XIX Concurso Nacional de Cuentos Infantiles Tertulia Goya; finalista en el XIX Certamen Literario Internacional “Santoña… La mar”; seleccionada en el VIII Concurso de Microrrelatos Sol Cultural; finalista en el “V Concurso de Microrrelatos ACEM ”; premio “XIV Concurso Internacional de Cuentos Infantiles sin fronteras de Otxarkoaga”; finalista en el LXVII Premio internacional del relatos cortos “La Felguera”; finalista I concurso de poesía Aliar; seleccionada en el I Certamen de Poesía y Microrrelatos “calle la calle”; finalista  de la II Edición del Premio Internacional de Narrativa Breve “Cristina Tomi” Un Café con Literatos. Recientemente, ha obtenido el primer premio del X Concurso Internacional de relato Luis Adaro.

Municipios como Camargo ya trabajan en experiencias que relacionan a los perros con los beneficios terapéuticos.

En concreto, se trata del programa ‘Visitas caninas para la salud y el bienestar’, que busca potenciar los beneficios terapéuticos que pueden aportar los animales de compañía, coordinado por la adiestradora Isabel García Imhof.

Un programa que consiste en la realización de visitas a centros de mayores, centros de salud, centros educativos y otras entidades de carácter social, en las que los voluntarios irán acompañados por sus mascotas, para ayudar así a mejorar el estado de ánimo de personas que sean usuarias de esos centros y que estén afectadas por problemas de salud físico o mental.

Se trata de aprovechar la manera en la que la presencia de mascotas e interactuar con ellas puede incidir y mejorar la salud física y psíquica de las personas, tal y como vienen mostrando distintos estudios.

Se considera que la presencia de estos animales, por su carácter, pueden ayudar a incrementar la calidad de vida tanto en adultos como en niños reduciendo el estrés, disminuyendo la sensación de soledad al crear un vínculo positivo con el perro y al facilitar también las interacciones con otras personas, mejorando la salud cardiovascular, ayudando a ejercitar brazos y piernas, o favoreciendo la estimulación mental y la verbalización de emociones.