‘Empujoncitos’ de salud para los mayores
Los expertos llevan muchos años hablando de políticas transversales de promoción de la salud y, más recientemente, de dar ‘empujoncitos’ a la salud, por ejemplo a través de hábitos saludables y de actividad física, especialmente en el marco de las políticas de envejecimiento activo.
Es la apuesta de Santoña, que en una colaboración de la Concejalía de Deportes del Ayuntamiento con el Centro de Salud financiada por fondos europeos y el Gobierno de Cantabria, a través de la convocatoria de Corporaciones Locales, con lo que además ha generado un puesto de trabajo.
Así, ha puesto en marcha un programa para recetar ejercicio físico a las personas mayores de 70 años del municipio con fragilidad, que tiene por objetivos «conseguir su envejecimiento activo y mejorar su calidad de vida».
La iniciativa está financiada por el Fondo Social Europeo, de tal forma que el Consistorio santoñés ha contratado a un técnico en educación física por medio de la subvención que el Gobierno de Cantabria concede a las Corporaciones Locales.
Los profesionales del Centro de Salud de Santoña, el doctor Rafael Colás y la enfermera Giovanna Lezama, son los encargados de determinar la fragilidad de los vecinos y quienes son aptos para desarrollar esta actividad física, previo realización de un test y una analítica.
Estos vecinos han sido sometidos a un pretest y al final del mismo se les realizará un postest para obtener unas conclusiones y así publicarlas, difundirlas y que sirvan de base para aplicar dicho programa en otros municipios, señaló Juan Rangel, técnico municipal en Deportes.
Este programa piloto en Cantabria se inició en enero del 2019 con la participación de 30 vecinos y unas sesiones de entrenamiento multicomponente dinamizadas por un técnico cualificado, Javier Loza Herbella, encaminadas a la mejora de la fuerza, resistencia, equilibrio, flexibilidad y el bienestar social de estos vecinos mayores de 70 años.
En 2020 este programa continúa con la participación de 70 vecinos, los cuales desarrollan el ejercicio físico en el Centro de Salud actual, aunque una vez inaugurado el nuevo se habilitara una sala de usos múltiples como gimnasio para impartir la actividad. Los vecinos, en grupos de 12, se benefician del ejercicio físico durante tres días a la semana, una hora al día, y desde el mes de octubre a junio.
Una vez realizado el postest entre las personas que han comenzado y concluido el programa, entre el 85 y 90 por ciento, las conclusiones indican que cerca del 80 por ciento salieron de esa fragilidad y obtuvieron beneficios psicológicos, físicos y sociales.
“Todo ello se traduce en una mejora de las actividades básicas del día a día con mayor seguridad y sin necesidad de ayuda de otras personas que las convertirían en dependientes. Obviamente el riesgo de caídas disminuye, dato importante por lo que acarrea ingreso hospitalario, elevado gasto sanitario, gasto familiar y social, y causa elevada de muerte”, señaló Juan Rangel.
“Diversas investigaciones indican que por cada euro invertido en deporte hay un ahorro sanitario de entre 15 y 50 euros. El deporte y la actividad física es un medicamento que no se puede encapsular y que aporta numerosos beneficios físicos y psicológicos”, comentó Juan Rangel.
En su opinión se debe implantar una cultura hacia la práctica deportiva en la tercera edad para favorecer un envejecimiento activo y de calidad, dotando de autonomía a todas esas personas que revelan cierta discapacidad o que van camino de ella.
En la actualidad, Santoña cuenta con 1.700 personas mayores de 70 años y en 10 años esa cifra se duplicara, ya que la pirámide social se invierte, señaló. “Como en muchas otras Comunidades debemos ser conscientes de ello y aplicar programas a estas franjas de edad pensando en ellos y en lo que supone de ahorro en gasto sanitario y social”, explicó el técnico municipal en Deportes.
La Concejalía de Deportes considera que no solo se deben poner en marcha programas para niños, jóvenes y adultos, sino para la tercera edad, un público objetivo que también se debe cuidar y mimar.