Unidas por Santander solicita al equipo de Gobierno del Ayuntamiento de la ciudad que lleve a cabo un refuerzo de las líneas del transporte público municipal del TUS, tanto en frecuencia de líneas como de horario, para paliar los problemas de movilidad que van a sufrir los vecinos de Nueva Montaña tras el derrumbe del aparcamiento que tuvo lugar el pasado lunes, 13 de enero.

Se desploma el techo de un aparcamiento subterráneo en Nueva Montaña

La coalición, compuesta por Izquierda Unida, Equo, Podemos y Santander Sí Puede, también pide al equipo municipal que se dirija a la administración competente de la gestión ferroviaria para que haya una mejora, tanto en accesos, instalaciones como horarios, en la estación de tren de Nueva Montaña.

“La idea es que se absorban las necesidades actuales de este barrio”, asegura el concejal de la formación, Miguel Saro, que apunta a que la vida cotidiana de estos vecinos va a estar condicionada durante meses.

Miguel Saro en su despacho en el Ayuntamiento || Foto: Unidas por Santander.

“Desde Unidas por Santander creemos que el Ayuntamiento debe actuar en la medida de sus competencias en los servicios que presta a los vecinos de Nueva Montaña”, después de que se hayan perdido cientos de aparcamientos en la zona residencial de Nueva Montaña tras el accidente.

“Las actuaciones que hay que realizar en la zona son muy extensas y van a impedir la recuperación de las zonas afectadas durante mucho tiempo, ya que primero hay que desescombrar y luego reconstruir el parking y las zonas de recreo”, ha recordado Saro, que insiste en que la labor va a llevar mucho tiempo porque “hay que averiguar aún quiénes son los responsables del derrumbe y a quién pertenecen las responsabilidades derivadas de esto”.

“Durante todo ese tiempo, que desafortunadamente va a ser muy prolongado, el Ayuntamiento debería velar, al menos, para que los vecinos tengan acceso a formas de transporte público más eficaces de las que tienen ahora mismo en contexto de las líneas del TUS”, recalca el edil, que lamenta que la frecuencia es insuficiente y se une a los continuos problemas que dan las líneas cercanías del tren y que supone una crítica constante de los usuarios.