Imagen portuaria
El Puerto, los puertos, siguen en las primeras planas. Los avatares del nuestro no son únicos. Compartimos con el de Bilbao muchos negocios y más problemas. No ha sido muy distinto a lo largo de la Historia. Las primeras imágenes de las entonces villas marineras, ya destacaban la actividad portuaria de las dos. Ayer, de nuevo, un barco saudí navegó entre esos dos puertos para acabar atracando allí. Hacía casi dos años que no lo hacía. Nos traspasaron un tráfico, muy probablemente ilegal, de armas y explosivos con destino a una guerra. A estas horas ese barco está en Santurce a la espera de la carga mortal que viene de Burgos. Un triángulo distinto al del siglo XV pero con los mismos vértices.
De esos tráficos habla poco amado presidente Revilla. Prefiere referirse a la imagen que no tienen más remedio que exhibir algunos ciudadanos extranjeros que merodean por las inmediaciones del puerto, presumiblemente para intentar abordar un barco que les lleve al Reino Unido y también presumiblemente sin permiso legal para ello, lo que les empuja a hacerlo de forma irregular. Y no pueden ducharse a diario y no tienen donde lavar sus escasas ropas ni comen caliente con regularidad. Tenemos un problema de cierto calibre, no llegan a la treintena esos muchachos extranjeros, y Revilla hace declaraciones en estado puro de cuñadismo extremista:
“No me digan a mí que no se observa una dejación de vigilancia por falta de medios en la parte exterior (del Puerto), por parte de cualquiera que una tarde se le ocurra pasear por allí y ver el aspecto de determinadas personas que, desde luego, no tienen pinta de haber venido de vacaciones ni de estar hospedados en hoteles de lujo… “
“El Puerto de Santander se suma a la tendencia de la extrema derecha de criminalizar al más débil”
Amado presidente, seguramente desde tu más tierna infancia, en la falda de Peña Sagra, escuchaste algo que correlacionaba en negativo el hábito con el monje. Muchos ciudadanos de nuestra región y de otras, pueden/podemos pensar que lo mejor de ti mismo no es la imagen. Desde que te hiciste un hueco en la telerrealidad después de mear junto al rey de Noruega en la boda real de mayo de 2004, compites a la altura de otras estrellas de la telebasura y eso a algunos ciudadanos, tan cántabros como tú, nos parece muy poco digno. Aunque te cambies de ropa y te duches a diario. Qué más quisieran la mayoría de los que no pueden hacerlo.
En el fondo, que el Bahri Yanbu esté atracado en Santurce ahora mismo, puede ser una buena noticia para el presidente regional y para el de la Autoridad Portuaria. Este puerto nuestro no podía con más escandaleras tan seguidas. Había una línea que unía Santander con Cork y esa línea marítima desaparecerá. Por falta de mercancías. Estaba en estado de prueba. Eso ha ocurrido antes y seguirá ocurriendo. Prueba y error. La base de la ciencia.
Empezará una nueva línea que unirá Bilbao con un puerto diferente, no con el de Cork. Una nueva prueba. Los ciudadanos extranjeros que para alguna de nuestras autoridades son culpables del fracaso comercial de la línea Santander-Cork, no quieren ir a Irlanda. Quieren ir al Reino Unido. Exponerse aquí para llegar a Irlanda no les da ninguna ventaja. Tendrían que exponerse allí de nuevo. Es posible que alguno no lo recuerde, pero Irlanda es una isla y Gran Bretaña otra. Diferente.
Hay una novedad que puede resultar insoportable para buena parte de la mayoría social que confía en el nuevo gobierno de España. Esta escala de un buque de la Bahri, es la primera que se produce con un gobierno progresista de coalición. Poco después de la moción de censura que llevó a Pedro Sánchez a la Moncloa, el gobierno socialista entró en numerosas contradicciones incluso entre alguno de sus miembros. Margarita Robles, Josep Borrell, Isabel Celáa… protagonizaron las más sonadas.
El gobierno en solitario del PSOE no acabó con esos tráficos ilícitos. Podemos había amplificado el eco de los movimientos sociales contrarios a esos tráficos. Destaca el pronunciamiento contrario del Parlamento de Cantabria y preguntas en el Congreso de la diputada por Cantabria Rosana Alonso y de uno de los diputados vizcaínos de la coalición. Ahora están en el Gobierno de España ¿Se empezará a notar?