La música no es ilegal… o al menos no debería serlo. Sin embargo, en Torrelavega siempre ha sobrevivido en la clandestinidad, sin una normativa que ampare a los músicos y promotores, de forma que, dependiendo de diferentes factores, históricamente se han vivido épocas de “manga ancha” y épocas de restricción total, siendo las últimas las que han llevado a la cultura de la ciudad a una agonía casi total que solo desafían unos pocos aventureros por su cuenta y riesgo.

La nueva Ley de Espectáculos de Cantabria aprobada en Marzo de 2017 no parecía traer nada bueno, con normas y requisitos pensados para eventos de 5000 personas, ridículas e imposibles de asumir extrapoladas a conciertos de 40 o 50 personas en un garito.

Pero, para sorpresa de todos, esta ley ofrecía en su texto la posibilidad a los ayuntamientos de redactar sus propias ordenanzas, de forma que se regulen los casos “excepcionales” que no se concretan en la propia ley. Un arma de doble filo, ya que dependiendo de la interpretación de cada ayuntamiento, las ordenanzas pueden ser facilitadoras o totalmente restrictivas.

En noviembre de 2017, el Ayuntamiento de Torrelavega aprobó por unanimidad una moción con el objeto de redactar una ordenanza que “facilitase” los eventos de pequeño formato en los locales, con la intención de revitalizar la vida y la cultura de la ciudad. Todos aplaudieron la medida y nosotros lo hicimos también, con el recelo propio hacia las cosas que dependen de la administración. La propia votación aprobaba una enmienda que marcaba 6 meses como plazo máximo para su redacción, reconociéndolo como un tiempo más que suficiente para tal efecto.

Trascurren dos años sin noticia alguna sobre el estado de tal ordenanza y las asociaciones empiezan a preguntar, en reuniones esporádicas, a los miembros de la corporación municipal, ofreciendo colaboración y asesoramiento para la redacción partiendo de un borrador. La respuesta que se repite es que “se está trabajando en ello” y la salida de un borrador será “inmediata”. Pasan así 6 meses y la situación empieza a ser insostenible al volver a cancelarse eventos mientras la regulación sigue en el aire. La única novedad es una nueva nota de prensa del concejal J. L. Urraca, en octubre del 2019, encargado de la redacción, que vuelve a anunciar que “el borrador estará listo en un mes”.

Tras incumplir nuevamente esta promesa de plazo, que ya se remonta a cuatro meses atrás, diferentes asociaciones y particulares se unen en la plataforma “En Torrelavega No Se Toca”, presionando en primer momento para que de una vez por todas salga este borrador y se pueda trabajar a partir del mismo.

Por ello, entre otras medidas, se acuerda crear una Mesa Redonda con representantes del ayuntamiento, de los técnicos municipales, de los hosteleros y de los propios músicos, Para usarlo como campo de trabajo de primera instancia, y usar los diferentes puntos de vista obtenidos de forma que ayude a que la ordenanza represente a todos los involucrados. Una herramienta muy útil que ofrecemos al propio ayuntamiento para facilitar su trabajo.

La Mesa Redonda será abierta al público, permitiendo que todos puedan recibir información contrastada de primera mano. Dicha cita será el próximo jueves 20 de Febrero a las 19:00 en la Sala de Exposiciones Mauro Muriedas de Torrelavega.

Con todo esto, solo se pretende que por fin la música sea legal, con una ordenanza que proteja la cultura base, que ayude a dinamizar la ciudad y que sea realista para su convivencia con los vecinos, como vecinos son los propios músicos y su entorno.