El Instituto Nacional de la Seguridad Social valida el modelo de pantalla facial de los makers

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Empezaron, porque esa fue la primera necesidad que detectaron –a la que se adelantaron, por si se daba–, con la fabricación de una pieza muy concreta para los respiradores en los hospitales.

Suena casi a magia: impresoras que no escupen letras a un folio sino que esculpen objetos reales. Tiene un punto de tecnología, aunque nos guste más imaginarlos como el horno de un alfarero. Puede que los makers, pese a que se organicen por telegram, en realidad sean artesanos.

Pero las necesidades fueron a más y también su trabajo: desde piezas para los equipos de protección (que requirieron una cadena de montaje que pusieron en marcha en colaboración con los voluntarios de la Red Cántabra de Apoyo Mutuo)…

…hasta mamparas para evidenciar la distancia de seguridad y protección en espacios de trabajo, pasando por los salvaorejas.

Ese fue el objeto de su último reto de 48 horas, para imprimir algo que detectaron que hacía más cómodo el trabajo de los sanitarios.

Y fue una de sus últimas acciones antes de una necesaria parada técnica porque durante semanas sus hornos no han parado de arder. Como ellos mismos dicen –esperamos camisetas con ese lema–: “Si vosotros aguantáis, nosotros no dormimos”.

Aunque suena a magia, la revolución maker es tan real que excede lo meramente voluntarioso: uno de sus modelos de pantalla facial ha recibido la validación oficial del Instituto Nacional de la Seguridad Social en el Trabajo, a través de su centro nacional de medios de protección.

Esto hito –en el que aunque, como todo su trabajo, se trata de una tarea colectivo, destacan el papel que ha tenido en el proceso Amparo Marín de la Bárcena—supone que todos los centros de salud podrán aceptar sus pantallas sin temor a que no cumplan con las especificaciones sanitarias.

EL IDIVAL INTENSIFICA LA INVESTIGACIÓN CONTRA EL CORONAVIRUS

Profesional de IDIVAL en el laboratorio.

La crisis del coronavirus está haciendo aflorar las contribuciones que al mundo de la salud puede hacer la tecnología y la ciencia.

En este último campo, el IDIVAL (el Instituto de Investigación Marqués de Valdecilla) ha lanzado la convocatoria de su Plan Dinamizador Biosanitario de Cantabria 2020, que incluye el programa de Intensificación de la actividad Investigadora.

Y que en este contexto deberá por tener objeto proyectos de investigación que permitan avanzar en el conocimiento del virus SARS-CoV-2 y la enfermedad CoVid-19, desde todos los puntos de vista posibles, incluyendo el clínico, diagnóstico, epidemiológico, patogénico, virológico, inmunológico, logístico, ético, legal o económico, reforzándose el interés multidisciplinar.

El programa persigue la liberación de personal con actividad asistencial sanitaria con elevada carga investigadora y/o de innovación, mediante la sustitución a tiempo parcial o total, de un facultativo o enfermera. Se trata de que la actividad investigadora que impida la labor asistencial puede desarrollarse gracias a sustituciones.

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