Gema Agudo es la directora general de Acción Cultural del Gobierno de Cantabria, cargo al que ha llegado en esta legislatura. Es una veterana de la cultura en nuestra comunidad, pues ha estado vinculada al Palacio de Festivales desde su inauguración hasta hace poco. Ahora está inmersa en un trabajo de bastante calado, que es tratar de dar soluciones a un sector que también es muy sensible al parón de actividad que ha sufrido la economía por las medidas de confinamiento.

La directora general admite que la situación «es muy delicada» en una entrevista a EL FARADIO DE LA MAÑANA. Los ingresos son escasos para muchos creadores en una situación normal, pero ahora se están paralizando porque no pueden defender sus trabajos ante el público, ya sea mediante una exposición en un centro cultural, la representación de una obra de teatro o un concierto.

Agudo quiso reconocer a los artistas que han aprovechado las redes sociales para divulgar contenidos. A ellos eso no les ayuda económicamente, porque lo hacen gratis, pero sí ha ayudado a que las semanas de encierro en casa pasaran de una manera más agradable y entretenida.

Cantabria ha pensado en un plan de choque. Para el sector cultural, es el Plan Talento Cantabria. El Gobierno tiene preparados 500.000 euros que pueden convertirse en líneas de avales para paliar la situación de artistas que todavía no puedan volver a una actividad mínimamente normal.

En cuanto a eventos culturales concretos, Agudo recuerda que Enredarte y Cantabria Escena Profesional dependen del Gobierno, puesto que son fórmulas para que la cultura pase por todos los municipios de la comunidad, pero de momento no pueden arrancar su actividad de nuevo. Una medida es adelantar parte del dinero que se iba a destinar para esos espectáculos itinerantes y que así el parón no les asfixie económicamente.

La calle, según el Gobierno, debe ser el lugar de reencuentro donde la cultura vuelva a tener un papel importante, de modo que sean los ciudadanos los que le den el valor que tiene y vuelvan a incorporarlo como algo propio y normalizado, ya se trate de la actuación de magos y titiriteros, o de un espectáculo de danza. Agudo no olvida que lo primero es la salud, y por eso la reapertura de espectáculos está supeditada a lo que las autoridades sanitarias determinen.