Unidas por Santander considera que las principales medidas locales que la ciudad debe llevar a cabo para superar la crisis sanitaria de la COVID-19, así como la social y económica que le seguirá, obligará a repensar los objetivos del presupuesto municipal.

Por este motivo, el concejal de la coalición, Miguel Saro, ha propuesto en el Pleno municipal de este jueves – el primero desde el Estado de Alarma- que se convoquen las comisiones para modificar el presupuesto del actual ejercicio 2020, y «centrarnos en las necesidades de los vecinos de Santander».

«Primero necesitamos conocer los datos y la capacidad de movilizar partidas de un sector a otro o dentro del mismo área de Gobierno», ha matizado Saro, que ha reiterado a la alcaldesa y al equipo de Gobierno su disposición a colaborar en el estudio, análisis y propuestas para establecer nuevas prioridades.

«Nuestra labor debe ir encaminada a un apoyo extra a las personas que han perdido a sus seres queridos», ha asegurado el edil, que se ha unido al pésame a las familias afectadas y ha manifestado su apoyo y especial agradecimiento a todos los servicios públicos, especialmente sanitarios, que se han puesto al frente en estos difíciles momentos, así como otros colectivos de voluntarios, asociaciones de vecinos y asociaciones como Cantabria con Bici y Red Cántabra de Apoyo Mutuo por su labor.

Una vez pasada la crisis sanitaria, Saro ha recalcado que los esfuerzos municipales deben pasar por aumentar las prestaciones sociales y mejorar las condiciones de movilidad sostenible para asegurar el distanciamiento social y la seguridad de los vecinos.

En cuanto a la atención social primaria, Saro ha insistido en que «debe ser el máximo destinatario de las partidas, tanto en liquidez como en gestión» y ha solicitado una mayor coordinación con otras administraciones públicas. También será necesario repensar el modelo de ciudad en materia de vivienda y crear, mediante gestión directa pública, una red de alquiler social que movilice las viviendas vacías para atraer población a la ciudad y así permitir planificar una ciudad compacta que reduzca los desplazamientos en vehículo privado.

LA MOVILIDAD: VIALES DE USO EXCLUSIVO CICLISTA Y PEATONAL

Y es que la movilidad será también un eje principal a tener en cuenta. «Me consta que hay planes y diagnósticos dirigidos en la medida que hay que llevar a cabo y que algunos requieren una inversión, como los planes ciclistas, que no podrán llevarse a cabo ahora; pero no es necesario desembolsar grandes cantidades de dinero para segregar el tráfico y hacer nuevos viales para que sean de uso exclusivo ciclista y peatonal», ha apuntado el concejal.

Saro ha recalcado que la figura del peatón «debe estar en el centro de nuestra atención» y que la alternativa para descongestionar el transporte público no debe pasar por el vehículo particular «porque no hay espacio en Santander para que circulen ni para que se aparque tanto vehículo», además del riesgo al aumento de la contaminación que eso produciría. Por ello, ha animado a continuar con el ensanchamiento de las aceras y a peatonalizar varias calles para impedir que haya proximidad física.

Saro también ha pedido que no se olvide a la cultura, que es «un derecho fundamental» y «un sector muy precarizado». «Sus propuestas deben ser escuchadas y deben tener claro no se eliminará la actividad de fomento de la cultura y se buscarán alternativas para que los vecinos sigan disfrutando de ellas», ha recalcado.

En el Pleno han tomado posesión dos nuevos concejales del PSOE, Alberto Torres y Concha González, en sustitución de Pedro Casares (diputado en el Congreso) y Ainoa Quiñones (delegada del Gobierno en Cantabria).

Además se ha modificado la ordenanza por la que se exime a los negocios de hostelería del pago de la tasa de terrazas en el año 2020, a propuesta del PSOE, con el apoyo de PP, Ciudadanos y PRC, la abstención de Unidas por Santander y el único voto en contra del concejal de VOX, Guillermo Pérez-Cossío.

Santander exime a la hostelería del pago de la tasa de terrazas durante 2020