La Vorágine acorta distancias y ya atiende con cita previa
La librería y espacio de cultura crítica La Vorágine ya está preparada para la atención con cita previa en su local en la calle Cisneros, 69, siguiendo las indicaciones para la Fase Cero de la desescalada en la que nos encontramos en este
momento.
De momento, esta semana se puede pedir cita previa para recoger pedidos en el 942 375226 o en el correo info@lavoragine.net
Y a partir del 11 abrirán para que se pueda entrar al espacio con las medidas de seguridad e higiene indicadas (que consisten en dos desinfecciones al día, higienización al entrar, distancia de seguridad, acceso a los baños muy restringido…)
Durante esta fase y las siguientes se dará prioridad a las personas de más de 65 años entre las 10 y las 12 horas, y entre las 19 y las 20 horas.
“Esperamos seguir siendo un lugar de resistencia y de rozamiento (de momento, conceptual) en tiempos en que debemos tejer complicidades sólidas”, explican , tras recordar que si durante el confinamiento han estado “cerca de vosotros” (con medidas como los textos de análisis filosófico de la crisis del coronavirus o la apertura de un servicio de venta a domicilio), ahora de lo que se trata es ya de “ir reduciendo distancias”, mientras tienen pendiente la celebración del séptimo aniversario de su apertura.
Las normas incluyen el uso de gel, la prohibición de uso del baño –en el que se han eliminado de forma temporal toallas, trapos de limpieza y paños de cocina de tela, de forma que todo ha sido sustituido por papel desechable–.
Además, se ha limitado al 100% el acceso a sus zonas de trabajo (el puesto de atención y la barra). Todas las superficies se desinfectarán y limpiarán dos veces al día (a las 13:30 y a las 20:30) y se ventila el espacio a primera hora de la mañana y a primera de la tarde.
Asimismo, cada día se tira la bolsa de basura dispuesta para el papel y los guantes desechables.
En siguientes fases podrá haber eventos: de momento trabajan en un sistema de transmisiones en directo para que lo que ocurra en La Vorágine con una sola persona, «pueda servir a cientos».