La UC registra picos de 1.500 videoconferencias al día
De 1.300 a 1.600 cursos en la plataforma Moodle, soporte de la formación a distancia; de 50 videoconferencias de media al día a 1.500 o 9.500 cuestionarios activados, con picos de casi 200 realizándose al mismo tiempo. Son solo algunos de los datos del día a día de la Universidad de Cantabria (UC) en estas semanas de estado de alarma, en las que se ha realizado una transición “acelerada” hacia una modalidad no presencial tanto de trabajo como de formación.
“Todos los indicadores de uso de nuestras infraestructuras tecnológicas nos están diciendo que se ha producido un aumento espectacular especialmente en algunos ámbitos de los servicios que ya se ofrecían con carácter general”, explica Mario Mañana, vicerrector de Campus, Servicios y Sostenibilidad de la UC.
El ejemplo más llamativo es el de las videoconferencias que en la UC han pasado de realizarse unas 50 diarias de media, a valores de pico de unas 1.500 al día. “Han pasado a ser la herramienta de soporte fundamental para coordinar reuniones administrativas, coordinación de tutorías con alumnos, la docencia no presencial, la supervisión de las actividades de evaluación… Todo gira en torno a las videoconferencias como herramienta fundamental de comunicación”, explica Mañana.
Por su parte, la plataforma Moodle de la UC, que da soporte a la docencia no presencial, ha registrado también un incremento de actividad totalmente excepcional, “no tanto de los cursos, que han pasado, eso sí, de 1.300 a 1.600, sino más en la activación de cuestionarios vinculados con la evaluación”. Se han activado en estos meses 9.500 cuestionarios con picos de 162 activos en el mismo minuto. “Esto es lo que realmente estresa a las infraestructuras: el número de usuarios que se accede en el mismo momento”, señala el vicerrector.
Estas cifras dan idea del “estrés” al que se ha sometido a las infraestructuras tecnológicas de la institución. Así lo explica Mario Mañana: “Nuestros servidores se han visto forzados a funcionar en territorios inexplorados y, salvo anécdotas puntuales, se han comportado razonablemente bien. Esto no es una casualidad: las infraestructuras están dimensionadas para admitir picos de trabajo porque en los últimos años se ha hecho un esfuerzo para ir sustituyendo cabinas de datos, elementos de comunicación, es decir, todo lo que gira alrededor de las tecnologías”.