DEBA y Concejo Abierto creen que el proyecto del Faro de Ajo es agresivo contra el paisaje
El nuevo proyecto para atraer turismo que ha puesto de acuerdo a Gobierno de Cantabria, Autoridad Portuaria de Santander y Ayuntamiento de Bareyo está recogiendo también diversas críticas. Ahora son la Plataforma en Defensa de la Bahía de Santander (DEBA) y el Concejo Abierto de la capital cántabra quienes se manifiestan en un comunicado sobre la pretensión de pintar el faro del Cabo de Ajo con los colores que ya son la marca de referencia del artista santanderino Okuda.
Tildan esa actuación como «pintarrajear» el faro y hasta lo califican de «horterada chirriante», en lo que ven como una «confusión entre cultura y espectáculo por parte de los políticos al frente de las instituciones públicas». Creen que su labor consiste, entre otras cosas, en defender el patrimonio histórico y cultural, y eso debe incluir conservar el paisaje.
Creen que «el faro de Ajo es un elemento definitorio del paisaje costero». Cambiarlo de color, por tanto, supondria alterar una de las señas de identidad del litoral de Cantabria. Y además afirman que sería «un precedente muy peligroso». Si lo que se pretende es ensalzar atracciones turísticas para el gusto de los visitantes, en el futuro se verían afectados otros elementos del patrimonio, y ponen como ejemplo las pinturas rupestres de Altamira o los capiteles de la Colegiata de Santillana del Mar.
También han querido subrayar que sus opiniones no tratan de desacreditar a Okuda como artista, «sino la pésima elección que se ha hecho del lugar para realizar este tipo de actuación». Precisamente estos elementos del paisaje les parece que deben ser preservados y potenciados como reclamo.
DeBa y Concejo Abierto añaden que llevar a cabo este tipo de proyectos debería contar con el beneplácito social. «Este tipo de actuaciones requieren necesariamente de un proceso de participación ciudadana», defienden, a la vez que recuerdan la particular protección de este edificio en la normativa municipal, como ya recordó Izquierda Unida al poco de conocerse el proyecto, que supondría un montante de 75.000 euros.
Ideas como esta, sostienen desde ambas asociaciones, refleja la poca confianza que tienen algunos ayuntamiento respecto a lugares que albergan y que pueden ser de gran valor, «sin necesidad de sobreactuaciones artificiales». En algunos sitios, hacer un mural puede ensalzar un punto de un municipio, pero en este caso se degradaría el faro «por pintar murales donde no se debe», concluyen.
IU PIDE A ZULOAGA PROTECCIÓN PATRIMONIAL DEL FARO
Izquierda Unida (IU) en Cantabria ha reclamado al Consejero de Cultura, Pablo Zuloaga, que comience, “si no lo ha hecho ya”, los trámites para dotar al faro de Ajo de una protección patrimonial “equivalente” a la del resto de faros de la comunidad.
En un comunicado, la coordinadora autonómica de la formación, Leticia Martínez, ha hecho esta petición al titular de Cultura y Patrimonio en el Gobierno de Cantabria “para blindar este monumento ante los futuros caprichos regionalistas o de cualquier alcalde con aires de grandeza”.
“Zuloaga tiene entre sus cometidos el velar por la protección del patrimonio de Cantabria y tiene una ocasión perfecta para demostrar que ocupa un cargo que actúa de acuerdo a la ley y a la salvaguarda del interés general”, afirmaba. “Si no interviene él, que es el máximo responsable político en cultura, ¿qué confianza pueden tener los profesionales del sector y la población en su conjunto de que los bienes comunes están a buen recaudo?”, continuaba.
“Del vicepresidente y consejero de Cultura se espera que se manifieste en relación a sus competencias, aunque haya rehusado hacerlo, pero, sobre todo, que actúe y tome decisiones
políticas en beneficio de los cántabros, cosa que tampoco ha hecho”, criticaba. “Ya se han pronunciado en contra de esta intervención colectivos culturales y conservacionistas, además de un clamor mayoritario de la población; no puede ser que se oiga el silencio desde el sillón del vicepresidente”, incidía.
Según explica Martínez, actualmente el faro de Ajo está protegido de forma “integral” en el Plan General de Ordenación Urbana de Bareyo y, asegura que, con esta normativa “sería suficiente para evitar que su socio de gobierno, el PRC, que ocupa también la presidencia de la Autoridad Portuaria (la propietaria de los terrenos) y la alcaldía del municipio destrocen el patrimonio que supone este emblema de Cantabria”.
Sin embargo, la líder de IU ha destacado que desde las filas regionalistas ya han encargado la elaboración de un nuevo PGOU “del que, si bien tardarán en aprobar, no sabemos si, en su afán por pintar de colores el faro, buscarán rebajar la carga de protección del faro y otros edificios del municipio retirando el articulado que ahora protege el edificio”.
De hecho, desde IU temen que el alcalde de Bareyo, José de la Hoz, esté tentado de encargar un informe sobre la intervención de Okuda en el edificio a la empresa encargada de la
elaboración del nuevo PGOU.
“Esperamos que el alcalde no esté pensando en obtener una opinión externa favorable y, por tanto, un informe ad hoc a través de la empresa adjudicataria del PGOU”, reflexiona la dirigente de IU. “Sería de suma gravedad sabiendo que, en estos casos, quien paga es quien suele tener la razón en el papel, aunque la realidad sea bien distinta”, continúa.
En cualquier caso, la también edil de IU en el ayuntamiento de El Astillero, recuerda que “por encima de ese hipotético informe externo está la decisión del arquitecto municipal”.
“¿Ha preguntado el señor de la Hoz a su arquitecto municipal si es viable la intervención que pretende encargar a Okuda, si es razonable incluirla, tal y como defiende, en una obra de mantenimiento?”, cuestionaba.
Jose Luis
Me gusta la obra de Okuda , peo disfrazar el Faro de Ajo de esa manera me parece algo innecesario . No sé por qué esa inclinación de arquitectos, y decoradores en modificar el estilo , línea, incluso colores en construcciones centenarias que nos ofrecen la posibilidad de saber cómo y con qué se construyeron en su momento .Su relación con el destino para el que fueron destinadas . y sintonía con el resto de edificaciones cercanas que obliga a tener en cuenta todo un conjunto. .
Si esto es inevitable se podría cubrir o forrar con algun tipo de aglomerado y pintar sobre ello. El efecto será el mismo pero con un esfuerzo menor el día que se vuelva al original..
Saludos Okuda ,me gusta su obra . J.L.Q.