DeLuz crea un mapa interactivo de pequeños productores en su web
Desde el grupo Deluz, que incluye los restaurantes ‘La Caseta de Bombas’ o ‘Celso y Manolo’, llevan semanas queriendo poner en valor a los pequeños productores cántabros durante este periodo de crisis, para ofrecernos una reflexión sobre la importancia de su trabajo y de apostar por la producción local y de proximidad.
Para ello, han creado en su página web un mapa de España de pequeños productores con los que trabajan, en los que poder consultar por comunidad autónoma todos los productos que enriquecen sus platos, y la gran labor de los pequeños ganaderos.
Y junto a este mapa, quieren destacar la labor de estos productores durante los 14 años de De Luz:
“Vamos a hablar de pastores con corazones grandes como sus montañas. De marineros con cabezas fuertes, curtidas a diario en la mar, cuando salen haga el día que haga. De queseros que nos hacen felices por las mañanas cuando desayunamos su queso fresco. De elaboradores de yogur que se les llena la cara de orgullo cuando hablan de lo ricos que están sus yogures y de cómo les gusta a todos, niños y mayores. De viticultores que se pusieron a hacer vino en nuestras montañas cuando nadie apostaba por ellos.
De agricultores idealistas con tesón y alma llena de ganas de sentir la tierra como la sentían sus abuelos. De vaqueros y vaqueras del siglo XXI que nos han hecho ser muy felices estos años cuando mordíamos una hamburguesa de sus terneras ecológicas y nos terminábamos todos los escalopines empanados de un plato.
Algunos son jóvenes y les hemos visto hacerse hombres en estos 14 años. Con todos hemos compartido sueños, hemos vivido la vida día a día sabiendo que estaban ahí. Nos han abierto sus casas, nos han dado de comer y hemos sentido siempre que formábamos parte de su familia. Ahora toca hablar de ellos para que les conozcáis más a fondo. Porque ahora también toca ayudarlos a ellos.
La gran parte de su venta venía de la hostelería y ahora este parón, que es necesario e importante para la sociedad y para su recuperación, no tiene en cuenta sus ciclos y tienen mucha de su producción parada. Es un momento bonito para compartir historias de personas que hacen que la ganadería, agricultura y pesca de España sea una realidad viable. Porque además es necesaria.”
Dentro del mapa de Cantabria en su web, cuentan con un gran número de productores y la posibilidad de obtener más información sobre su trabajo o contactar con ellos.
En la comunidad cuentan con: Siete Valles de Montaña, Los Tiemblos, Cabrito ecológico de Rafa Roiz, La Lonja de Santander, Lechazo eco de Chencho Gómez, Cerdo Salvaje Pasiego de Pablo, Ecovaldeolea, La Jarradilla, El Carmen, Casona Micaela, Cerveza Colegiata, Siderit, Lechería la Cántara, La Pasiega de Peña Pelada, Orulisa de los Picos, Angelachu, Brezomiel, Sobaos ecológicos Ibáñez, Fredo la Estrella del Norte, Carnicería Juanito, Quesería Javier Campo, Quesoba y Sel D’Aiz.
LA SITUACIÓN TRAS EL COVID-19
Víctor, ganadero de la quesería ecológica de Los Tiemblos, es uno de los productores que, como explica Deluz, por culpa del Covid-19 sus ventas han bajado un -50%. “Las vacas no entienden de virus”, dice.
Siguen produciendo lo mismo, 15 litros de leche al día cada una, y para no tener que tirarla han comenzado a hacer más queso curado. Están en el barrio de La Sota, en San Pedro del Romeral (Valles Pasiegos).
“Os prometemos que desayunar una tostada con el queso fresco de Los Tiemblos y un poco de aceite de oliva es un antes y un después: un antes porque te vas a preguntar qué has hecho todo este tiempo comiendo ese queso de supermercado que parece plastificado y que no tiene nada que ver con el queso fresco de verdad, y un después porque no vas a volver a comer otro que no sea este”, afirma Deluz.
Estos productos pueden encontrarse en Santander, en tiendas como El Colmado Santander, en el puesto de La Asturiana y La Despensa de Sergio (Mercado de la Esperanza), en Bio+bio, Herbolario Laurel, Herbolario La Salud, Mantequerías Cristina, La huerta de Teresa y Charcutería Luengo, entre otras.
Y se encargan de resaltar los efectos la ganadería intensiva, en la que una vaca produce de media 45 litros al día, 30 más que en ganadería ecológica o extensiva. ¿Por qué? “Porque no se respetan los tiempos de la naturaleza, porque no se mira por el bienestar animal, porque se les da de comer piensos y se les inyectan hormonas para que solamente produzcan, produzcan y produzcan”.
Viven en la Sota, uno de los valles más bonitos y más salvajes de este país. Para comprarles directamente sólo hay que llamarles por teléfono, “con paciencia porque hay zonas que no tienen cobertura”, al 609 407 745.
Hace unos días quisieron hacer una mención especial en este caso a otro Víctor y sus hermanos, de la lechería La Cántara, que explicaban que este no va a ser su mejor año.
El grupo Deluz explica que “hace unos meses le grabamos durante su reparto diario a nuestros locales y nos contó por qué la leche fresca de Cantabria es tan buena: por el pasto del que se alimentan (porque el de Cantabria es único en el mundo entero)”.
“Las vacas de La Cántara viven libres, a su ritmo (que es un ritmo muy tranquilo). Su leche sabe como la leche de verdad, un sabor que quizá algunos ya han olvidado porque la industrial no tiene nada que ver. Es una leche que sienta bien y que además es buena para tu salud por la cantidad de ácidos grasos omega 3 y 6 que tiene. Es decir, buena para el colesterol malo” explican.
Pero ahora, como muchos pequeños productores, se han visto golpeados por la crisis por coronavirus, y han tomado la iniciativa de vender a domicilio. “Volvemos a la época de nuestros abuelos: el lechero te deja la leche recién ordeñada en la puerta de casa. Pero los ganaderos y pequeños productores necesitan la ayuda de la sociedad” destaca el Deluz.
Además de la leche fresca, también elaboran quesos con 25 días de curación, queso de nata, queso fresco, yogur natural y yogur batido. Para obtener información sólo hay que enviar un mensaje de WhatsApp al 675 69 69 86.
Hace unas semanas nos presentaban a Dani, ganadero de Eco Valdeolea además de maestro, que vive en San Martín de Hoyos con su abuela y su padre, Jose. Esta zona de Valdeolea es uno de esos lugares donde no pasa casi nadie; solo hay 11 habitantes.
Dani tomó las riendas de la ganadería para seguir la estela de su madre, Conchi, una mujer que ha marcado un antes y un después en la ganadería ecológica de España. Escribía en su blog, ‘Ecovaldeolea’, y era como leer a una antropóloga haciendo tesis sobre cómo eran los pueblos de Cantabria hace 30 o 40 años, y lo que son ahora.
“Hace poco comimos con él en Santander y sus ojos irradiaban futuro. Su fuerza en la mirada es la mezcla de los dos, de su padre y de su madre, aunque los pensamientos y las ideas ya le pertenecían a él” relata Carlos Zamora, del grupo Deluz.
Dani decidió dejar la enseñanza para seguir con la ganadería de su madre, orgullo para los cántabros. Una nave en mitad de una loma y Castilla en el horizonte. No en vano hay una torre del siglo XIV que servía de vigía de la entrada al valle de Campoo por Castilla. Y, de paso, una iglesia románica del siglo XII.
“Nosotros le compramos sus terneras ecológicas para nuestros restaurantes, pero también, si quieres, le puedes llamar y te venderá un lote para que compartas con tus vecinos o para que guardes en el congelador para tener toda esta cuarentena” señala Zamora, y añade que “si pruebas uno de sus filetes, vas a querer irte hasta Valdeolea para conocerle a él, a su padre y a su abuela”.
La información puede encontrarse en su blog www.ecovaldeolea.blogspot.com, o en el teléfono 630 102 918.