El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Santander insta al Ayuntamiento de Santander a que justifique la emergencia del derribo del edificio en la calle Alta, 17, tal y como recoge un auto al que ha tenido acceso a EL FARADIO.

Tal y como viene contando este periódico, el derribo se aprobó por procedimiento de emergencia, tras declararse la ruina económica (los costes de la reforma son superiores a la mitad del valor del inmueble) y después de que no se atendieran los requerimientos del Consistorio.

Una de las propietarias se mostró en contra del derribo, pedido por la comunidad –aunque no de urgencia–, y pidió medidas cautelares para que se paralizara la obra judicialmente y se impidiera así que se causara el daño en su vivienda.

La propietaria argumentaba que si se ejecutara la obra, se produciría un daño económico en su contra y una vulneración de sus derechos, mientras que no hacerlo no supondría daño para el interés público.

El Juzgado apunta que no consta si la resolución de ruina económica del edificio es firme o no.

La declaración se apoya en un aviso de riesgo para viandantes por el riesgo de colapso de un muro, cuyo derribo inmediato se ordena.

Lo que se hace es rechazar las medidas cautelarísimas –es decir, la petición urgente de parar las obras, en las que no hace falta escuchar a la administración, ya que el criterio es impedir el daño–, y se pasa a las cautelares ‘a secas’,  que siguen siendo prioritarias, aunque no urgentes.

Y en ese caso, que es en el que nos encontramos ahora, es cuando sí que se debe escuchar al Consistorio, que debe justificar la urgencia de la medida –no la propia medida en sí misma, pedida por la comunidad—,

El Juzgado entiende que se debe escuchar al Ayuntamiento de Santander para que argumente sobre el colapso y el daño público invocado.

Así que se cita al Ayuntamiento de Santander a que explique sus motivos, dándole de plazo este mismo viernes 17, a las 11.00 horas. Será tras oírlo –tiene la opción de hacerlo antes de plazo– cuando se tome una decisión sobre la paralización de las obras.