El derrumbe hace tres años de parte de la fachada de un edificio en la calle Sol 57 en el que se estaban produciendo unas obras en un bajo sin la licencia adecuada le costó a las arcas municipales de Santander un millón de euros.

En detalle, la cifra asciende a 1.034.968,27 euros, según especificó en el último Pleno municipal el concejal de Obras, César Díaz, a preguntas de Unidas por Santander.

Esta cifra se corresponde tanto con las obras de emergencia física en el inmueble como las ayudas de carácter asistencia a los vecinos perjudicados por el derrumbe.

No cubre, por tanto, los daños sufridos en los propios inmuebles por cada vecino, ya que según el equipo de Gobierno los propietarios aún no han facilitado la relación de los daños y perjuicios que sufrieron.

La reparación de esos daños, y el propio futuro del edificio, dependerá de lo que se establezca en un futuro expediente municipal, proceso que acaba de iniciarse, según expuso el edil a Miguel Saro.

Una reciente sentencia del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Santander que abordaba las sanciones a las empresas implicadas en las obras (la promotora, la ingeniería y la contratista) cuestionaba la falta de concreción del equipo de Gobierno para el futuro del edificio, al no concretar si habrá un nuevo edificio o si se reformará el ya existente, y su encaje en el Plan General, además de la fórmula de ser una institución la que obligue a otra persona o ente a indemnizar a terceros.

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En la sentencia se explicaba que si las sanciones a las empresas debían ser menores de lo que el Ayuntamiento de Santander les había impuesto es porque estas se habían ceñido a seguir las instrucciones dadas por el Consistorio, incluyendo la no paralización de las obras en ningún momento pese a no estar amparadas por licencia (de lo que no tuvo constancia la Policía, que cuando fue a pararlas, se encontró con que ya tenían la nueva licencia, de obra mayor, conseguida en cuestión de días y el departamento de Obras ordenó que siguieran).

Los servicios jurídicos están valorando en estos momentos si presentan o no recurso contra esta sentencia, expuso Díaz.

Por su parte, el Partido Socialista preguntó al equipo de Gobierno por el derrumbe, desde el detalle de los plazos de los trámites de las licencias en Santander hasta si había despachado esos días el asunto con alguno de los responsables de la empresa – con la que tanto el edil como el exalcalde mantenían amistad, según publicó EL FARADIO–, entre otros aspectos.

“Ya he respondido a todo eso”, replicó Díaz, diciendo que “toda la documentación” está en el expediente municipal, así como en lo remitido a la Fiscalía o en las actas de Plenos o comisiones correspondientes, y advirtiendo de que era “consciente de lo que pretende con estas preguntas”, según le dijo al portavoz socialista, Daniel Fernández.