El grupo empresarial SADISA, que gestiona a través de sus empresas ASCAN-GEASER las basuras de Santander, ha recordado al Ayuntamiento de la capital y a su alcaldesa, Gema Igual, como “pregonó” la “eficacia” de Smart City y su relación con la gestión de residuos.

Lo hacen en sus alegaciones al expediente de resolución del concurso de las basuras de Santander, a las que ha tenido acceso EL FARADIO, y dentro de un proceso sobre el que el jueves se votará una comisión de investigación.

El expediente fue abierto después de que un informe de Intervención constatara incumplimientos en el pliego por valor de 7 millones de euros, materializados en los problemas de limpieza en las calles denunciados durante años por vecinos, asociaciones y partidos políticos, tanto de la oposición como de Ciudadanos, hoy en el equipo de Gobierno.

Dentro de ese proceso hay una parte en la que la empresa se defiende, a través de sus alegaciones.

Hablamos todavía de un plano administrativo, al que puede suceder una vía judicial, que, de hecho, ya está abierta en parte por sucesivos recursos de SADISA a las penalizaciones –multas por incumplimientos–.

De hecho, el relacionado con la plataforma SMART tiene incluso fecha de juicio: el próximo 24 de noviembre,

LA TARDÍA CONEXIÓN A LA PLATAFORMA…

En el informe de Intervención, consultado en su momento por EL FARADIO, este alto funcionario municipal encargado de la fiscalización de contratos mostraba su sorpresa porque la empresa tardara años en conectarse a la plataforma de datos SMART, lo que además tuvo consecuencias, indicaba, en el control del cumplimiento de contrato.

Y lo hacía, entre otros motivos, señalando que para esa conexión SADISA recurrió a la empresa NEC –para la que acabaría prestando servicios el exalcalde y exministro De la Serna–, que fue una de las empresas que precisamente desarrolló lo que se llamó el ‘cerebro’ de la Smart City.

Se recogen a tal efecto facturas abonadas por un importe de un millón de ueros.

…FUE AUTORIZADA Y COMPENSADA POR EL AYUNTAMIENTO

También la empresa considera “realmente sorprendente” esas afirmaciones, tras relatar que en todo el proceso de adecuación a SMART CITY se trabajó en “estrecha colaboración y cooperación” con el Ayuntamiento, con “reuniones constantes”.

Todos los cambios, detallan, tenían el “visto bueno” del Consistorio, a través del responsable designado, con el que se trabajó en “coordinación directa”.

Es más, SADISA argumenta que es al Ayuntamiento a quien le correspondía sacar a concurso la plataforma de datos para la posterior conexión por su parte.

Pero eso “nunca se realizó” y fue la empresa la que tuvo que diseñar “alternativas tecnológicas” como prueba de “buena fe” y “cumplimiento fiel” del contrato.

Y aportan al respecto documentación en la que el que fuera responsable de Innovación, José Antonio Teixeira, aceptó descontar de sus pagos los sobrecostes, por valor de 150.000 euros al año, por haber desarrollado ellos su plataforma.

La empresa asegura que el propio Consistorio admitió “deficiencias”, “bajo su responsabilidad”, e incluso reconoció los “esfuerzos adicionales” de la empresa para buscar alternativas.

Esas alternativas, su propio sistema, fueron “aceptadas” y se consideró que debían ser “abonadas” por el Consistorio al no ser objeto expreso del contrato.

En concreto, SADISA detalla en sus alegaciones los distintos sobrecostes anuales que, una vez ajustadas las cuentas de distintos conceptos, se quedan en una diferencia a favor de la empresa de 88.990 euros

EL AYUNTAMIENTO PUBLICITÓ LA EXCELENCIA DEL SERVICIO Y SU TECNOLOGÍA

Desde el grupo empresarial SADISA recuerdan que el de las basuras, y en especial en la parte tecnológica y sus implicaciones SMART, es un servicio “cuya utilidad y eficacia ha sido pregonada por la propia alcaldesa”, “incluso en entrevistas en medios internacionales”.

Una televisión japonesa entrevistó a la regidora, Gema Igual

Y aporta recortes de prensa o enlaces en los que el equipo de Gobierno usaba “la calidad de la limpieza de Santander como referente tanto a nivel nacional como internacional”.

En general, SADISA recuerda que a lo largo de los últimos años, el Ayuntamiento “ha publicitado la excelencia del trabajo, la limpieza de las calles u el sistema de tecnología” empleado, citando que la alcaldesa ha puesto a Santander como “referente” y “modelo a imitar”.

Además, enumera distintos certificados de calidad, medallas, etc…, obtenidas durante los años.

También se refiere a las jornadas Smartcities 2016, las visitas de delegaciones de Alemania o Francia, colaboraciones con NEC o el “reconocimiento y agradecimientos” del Ayuntamiento y su personal a la colaboración prestada, así como el “relfejo en la prensa” de la “buena gestión” de Santander en sus residuos.

VULNERACIÓN DE LOS PLIEGOS

Frente a esto, SADISA replica que es la propia administración la que ha vulnerado pliegos y procedimientos, y, en especial, paradójicamente, en lo relacionado con el control del servicio (el Interventor asegura que el retraso en la conexión a la plataforma se tradujo en dificultades para el control, mientras que la empresa niega que tuviera consecuencias en este sentido).

Es más, sostienen que la cesión del contrato de control, a la Fundación Leonardo Torres Quevedo fue “contraria a derecho”, y “absolutamente ilegal”, por lo que, según SADISA, debió haberse denegado.

Tras mencionar a todos los concejales que participaron en este trámite, apuntan que en el “improbable supuesto” de que no se estimen sus alegaciones, se llevará el tema a sede judicial.