Comisiones Obreras de Cantabria (CCOO) ha señalado hoy que los datos extraídos de la Encuesta de Población Activa (EPA) del Tercer Trimestre de 2020 publicada por el Instituto Nacional de Estadística evidencian la importante y negativa influencia de la pandemia en nuestro mercado de trabajo con un importante aumento del paro, descenso de la población ocupada, de los trabajadores asalariados y un importante aumento de los autónomos

Por su parte, el secretario de Empleo de UGT en Cantabria, Julio Ibáñez, ha asegurado  que estas estadísticas confirman que «es imprescindible que nuestra comunidad autónoma aproveche los fondos europeos para cambiar su modelo productivo de una vez por todas, que es lo que se pretende promover desde la Unión Europea».

UGT

Ibáñez precisó que «el aumento del empleo y el descenso del paro en el trimestre veraniego no es nuevo en Cantabria porque simplemente confirma la gran dependencia al sector servicios y, en el caso de este año, a un buen verano turístico a diferencia de lo ocurrido en el resto del país, pese a la situación en la que estamos por la pandemia; a lo que se une el efecto rebote del desconfinamiento a partir del mes de junio cuando las personas pudieron salir de casa a buscar un empleo».

El responsable regional de Empleo de UGT insistió en que «aumente el empleo en el trimestre veraniego es lo normal pero no es aceptable que casi un 70% de ese incremento corresponda a asalariados con un contrato temporal (14.100 de los 20.700 ocupados más) o que sólo en un año se pierden 8.500 empleos a jornada completa; signo evidente de cómo es nuestro mercado laboral y el modelo productivo en el que se asienta».

El sindicalista aludió también a «la necesidad de mejorar la protección por desempleo porque ya antes de la pandemia había muchos desempleados que no percibían prestación alguna», tras puntualizar que «pese al incremento del empleo en el trimestre entre junio y agosto, Cantabria ha vuelto a incrementar (+1.200) los desempleados de larga duración que llevan buscando un puesto de trabajo desde hace más de un año».

«No podemos dejar a nadie atrás», agregó el secretario de Empleo de UGT, que recordó que ya hay casi 10.000 desempleados de larga duración en Cantabria, el 30% del total».

CCOO

Laura Lombilla, secretaria de empleo de CCOO de Cantabria, destaca el incremento en casi 4.000 personas autónomas respecto al segundo trimestre en Cantabria, lo que representa un trasvase preocupante del empleo asalariado al empleo autónomo.

“El empleo autónomo no puede ser la única salida que tienen las personas trabajadoras para trabajar, nos preguntamos cuál va a ser la estabilidad y la protección de estos autónomos en unos meses”, apunta la secretaria de Empleo de CCOO.

Lombilla insiste: “Las políticas activas de empleo tienen que ofrecer una respuesta para todas las personas que se queden sin trabajo, para evitar que tengan que verse abocados a hacerse autónomos, son cifras que el mercado no puede absorber”. Los datos muestran, además, que las personas que trabajan de forma autónoma se aglutinan en el sector primario y de la construcción.

Lombilla señala que a pesar del buen tiempo y de que las características de nuestro territorio han beneficiado principalmente a la hostelería durante este trimestre, el paro ha sufrido un importante aumento respecto al año anterior a consecuencia de la pandemia de COVID-19.

En los datos que publica el INE, el sindicato destaca el caso de las personas que llevan más de un año en situación de desempleo : “Siempre es una mala noticia el aumento de personas con largos periodos en búsqueda de empleo, y especialmente preocupante el caso de las mujeres que llevan en búsqueda de empleo de uno a dos años, que han pasado de ser 900 a 2.300 en el último año”.

Una señal más de la influencia de la pandemia es el descenso de los contratos indefinidos y el incremento de los contratos temporales. Los datos muestran, además, que se reducen las personas con jornadas a tiempo completo y aumentan aquellas con jornada a tiempo parcial, por una clara influencia de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE).

Ante el escenario producido por la pandemia sanitaria y la situación que arrastra nuestro mercado de trabajo a consecuencia de ella, Lombilla recuerda de nuevo la urgente necesidad de impulsar un cambio del modelo productivo “que genere empleo estable y de calidad”, y le pide al Gobierno de Cantabria “que afine el tiro y utilice los fondos europeos para la recuperación para ese fin”.

El sector servicios, y concretamente la hostelería, también son frágiles, y la estabilidad del mercado de trabajo no puede depender de los empleos generados en temporada por el sector servicios. “Si estos son los datos del tercer trimestre, nos preocupa qué va a pasar en los siguientes trimestres y auguramos un invierno duro”, señala Lombilla.

“Seguiremos reclamando políticas públicas que refuercen el mantenimiento del empleo, las personas trabajadoras necesitan empleos de calidad y estables para superar la incertidumbre del momento actua”, concluye Lombilla..