La Puchera, la división de comida tradicional a domicilio del grupo hostelero Quebec, será la que se encargue de centralizar el reparto de comida para llevar en sus establecimientos.

Las nuevas restricciones implantadas en Cantabria para tratar de frenar la propagación del coronavirus afectan a la hostelería en el sentido de que se limita la actividad a las terrazas y se impide la atención en el interior, mientras que se permite la comida a domicilio o el acudir a los locales para recoger comida para llevar.

En este sentido, el Grupo Quebec (conocido por los pinchos de tortilla que le dieron origen, desde donde surgieron nuevas ramas como el restaurante de comida peruana Lolas o las Ramonotecas, además de la evolución hacia pinchos más allá de los de tortilla y La Patita, de comida tradicional, incluyendo un establecimiento en Madrid alcanzando el centenar de empleados) ya contaba con La Puchera.

Orientado a domicilios u oficinas, La Puchera permite el encargo desde pinchos (incluso en grandes cantidades para eventos) hasta carnes o pescados, arroces, verduras o potajes, incluyendo tortillas.

Así que ahora La Puchera atenderá desde sus nuevas tiendas, que están ubicadas en el Quebec de la Plaza de las cervezas o en el Lolas Urban Beer del Ayuntamiento.

Mientras, el grupo ha cerrado los Quebecs de la calle Cervantes, Ataúlfo Argenta y Lealtad, ante las nuevas restricciones o la falta de terraza; y también las dos Ramonotecas, así como los locales Lolas en el Sardinero y la Plaza de las Cervezas y La Patita.