La empresaria y Directora de Operaciones de Vega Pelayo Gema Coria se incorpora como asesora al recién creado fondo de capital LUA, impulsado por el economista José Carlos Díez y que prevé invertir en entre 10 y 20 compañías innovadoras en fase de expansión.

Gema Coria, que lidera los proyectos de expansión y la transformación digital de su empresa y que actualmente es vicepresidenta de CEOE-CEPYME Cantabria y Presidenta de la Asociación de Jóvenes Empresarios de Cantabria, se suma así al equipo asesor del fondo puesto en marcha por Díez junto a Paulina Beato, expresidenta de Red Eléctrica y antigua consejera de Banesto y Repsol, entre otras; Sergio Belza, consejero delegado de Aneto Capital; Javier García, Manuel Bonilla y Francisco Lombardo.

LUA Fund invertirá exclusivamente en empresas de carácter innovador, preferiblemente en beneficios y cuyo producto o servicio puede escalarse fuera de España. Se además negocios que tengan implantados en su estrategia los Objetivos de Desarrollo Sostenible y pertenecientes a sectores como agro, salud, aeroespacial, industria 4.0, economía circular, sostenibilidad; con foco en la transformación digital y en las tecnologías de vanguardia: inteligencia artificial, big data, blockchain, ciberseguridad e internet de las cosas.

Inicialmente el fondo centrará en compañías de España y Portugal aunque valora la posibilidad de entrar también en empresas latinoamericanas interesadas en dar el salto a Europa.

Gema Coria, Consejera de la Sociedad de Garantía Recíproca de Cantabria y miembro de la Cámara de Comercio y de la Asociación de la Empresa Familiar así como miembro de la Comisión de Igualdad de la patronal, ha asegurado que “es una satisfacción formar parte de un proyecto que tiene como objetivo último ayudar a construir un tejido empresarial más fuerte”.

VEGA PELAYO

El recorrido de Vega Pelayo comenzó en los años 40 con la llegada de los abuelos desde Castilla a Cantabria, donde adquirieron unos obradores, los conocidos La Constancia, en Santander, donde la Familia Coria Gallegos trabajó durante décadas por el crecimiento de un sueño familiar. En la década de los 70 se adquiere el obrador de ‘Panaderías Cántabras’ para ampliar capacidad productiva y atender las necesidades de nuestros clientes.

A partir de ahí, se fue creciendo hasta convertirse en una marca nacional, con sus instalaciones en el polígono industrial de Guarnizo, en Astillero, que les permitieron ampliar su capacidad productiva, innovar en procesos y ampliar personal

En los años 90, con un relevo generacional en marcha, la nueva familia Coria Ríos decide aumentar su línea de negocio por la vertiente de la pastelería apostando por la fabricación artesanal de productos de Cantabria, uniendo al grupo de empresas existentes a un pequeño obrador de Sobaos Pasiegos llamado ‘Vega Pelayo SL’ ubicado en Santander, obrador que dada la demanda del mercado se traslada a finales de esta década al Polígono Industrial de Guarnizo, de cara a ampliar capacidad productiva y con el objetivo de estar siempre en la vanguardia tecnológica.

Desde allí elaboran sobaos pasiegos, corbatas de hojaldre, mantecadas y mojicones, entre otros productos.

Actualmente, sus productos están presentes en todo el territorio nacional, en las principales tiendas de todo el país. Fabrican bajo la marca Vega Pas, como también para la marca del distribuidor, exportando a Europa, África y Latinoamérica.

Además, en el año 2014 se unieron conjuntamente por primera vez en las normas internacionales de calidad: International Food Standard (IFS) y British Retail Consortium (BRC). Normas que marcan sus actuaciones como empresa para cumplir con los objetivos de calidad de todos sus clientes.

A lo largo de estos años han recibido distinciones como el premio a la Mujer Emprendedora de Emprendedores Cantabria de El Diario Montañés, o el premio a la Mejor PYME por Carrefour.

Su producto más destacado es el sobao de indicación geográfica protegida, lo que indica que sus sobaos tienen una calidad y reputación debido al lugar de origen en que se elaboran. Un sello que certifica que ha sido elaborado y envasado en la Comarca del Pas, una zona geográfica delimitada por los rios Pas y Pisueña en la zona centro de la Comunidad Autónoma de Cantabria.

Le caracteriza su color amarillo intenso, causado por el uso de una mantequilla 100% natural, junto con una tierna superficie de color tostado. Su textura es densa, pero muy esponjosa y con un sabor dulce donde predomina el aroma a mantequilla.

Asimismo, cuentan con otros productos como corbatas, mantecados, mojicones, muffins, hojaldres y magdalenas.