Izquierda Unida propone congelar los conciertos y reforzar con 10 millones la educación pública en Cantabria
Izquierda Unida de Cantabria apuesta en sus enmiendas a los presupuestos generales de la comunidad para el año que viene por un refuerzo de la red pública de educación, que, a su juicio y dado el proyecto presentado por el Gobierno de Cantabria, se logra congelando las partidas de los colegios concertados.
Según explican, mientras existe un trasvase de alumnado desde los centros privados-concertados (y en muchas ocasiones religiosos) a la escuela pública, no se está realizando, por parte del Gobierno, el trasvase de fondos correspondiente para blindar la educación pública “que atiende a todos y todas sin preguntar de dónde vienen”.
En un comunicado, el coordinador de Izquierda Unida en Cantabria, Israel Ruiz Salmón, ha advertido de que “lejos de lo que dicen los partidos de la derecha, lo cierto es que PSOE y PRC incrementan las partidas para los conciertos educativos” en cinco millones con respecto al presupuesto de 2020.
Sin embargo, el líder de IU va más allá tras analizar las liquidaciones de los presupuestos desde 2018. En aquel año los presupuestos recogieron una partida inicial de 77,3 millones para los centros privados sostenidos con fondos públicos, “pero la realidad fue que recibieron 13,1 millones más a través de modificaciones presupuestarias”. Y en 2019 ocurrió de forma similar: se aumentó la partida inicial a los 77,6 millones para luego inyectar a estos centros otros 16,3 millones “de tapadillo”.
En el presupuesto en vigor de 2020, la partida inicial fue, de nuevo, aumentada hasta los 82,4 millones, pero todavía no se conoce la liquidación “aunque estamos seguros que, al igual que en años anteriores, ha habido recursos extra para estos centros”. Para 2021, el gobierno PRC-PSOE ha presupuestado 87,4 millones.
“El trasvase de fondos públicos a estos centros no ha dejado de crecer, a razón de 5 millones cada año (2019-2021) más las modificaciones extra, mientras la red pública, con cada vez más alumnado, no está siendo ampliada”, incidía.
“Lo que de verdad está siendo atacada, desde hace años, es la enseñanza pública”, ha aseverado, recordando los recortes económicos, la falta de inversiones y el “desprecio” a la comunidad educativa.
Por eso, la izquierda cántabra plantea una redistribución de partidas económicas que se dirigían a la financiación de centros privados y sus asociaciones, de forma que se obtienen casi 10 millones de euros que sirven para apoyar la enseñanza pública y la formación profesional, a través de programas y nuevas dotaciones, aulas y centros.
“Docentes, personal de centros y miembros de la comunidad educativa lo han dado todo durante el confinamiento para evitar que los estudiantes se quedaran sin formación”, ha ensalzado Israel Ruiz Salmón, quien ha puesto de manifiesto como “el esfuerzo y las horas de los trabajadores públicos suplieron las carencias de la administración a la hora de planificar e invertir”.
“La pandemia evidencia las desigualdades en el acceso a la educación y las tecnologías”, ha incidido, añadiendo que “precisamente por eso no se entiende que, en lugar de corregir esas carencias, las prioridades políticas del PRC con la connivencia del PSOE vayan a la educación que segrega, cobra impuestos revolucionarios y se instala en las zonas con más riqueza de la comunidad”.
Además, en sus enmiendas se apuesta por reforzar la formación profesional y permanente, en un modelo que priorice la investigación como “garantía de futuro” frente a un sistema que lo fía a “concursos puntuales”.