La Orquesta Sinfónica del Cantábrico (OSCAN), dirigida por Paula Sumillera, rinde homenaje a la espiritualidad este domingo a las 18:00 horas en la Catedral de Santander. El programa, denominado ‘El Ser Espiritual’, combina composiciones de música sacra de Mendelssohn y Fauré, con obras de carácter introspectivo, como ‘Simple Symphony’ de Britten.

La Orquesta acompañará a la soprano Elena Herrero en la interpretación de ‘Salve Regina’, de Félix Mendelssohn; ‘Ave María’, adaptación del Intermezzo de ‘Cavalleria rusticana’, de Pietro Mascagni y Pietro Mazzoni; y ‘Pie Jesu’, del ‘Réquiem en re menor’ de Gabriel Fauré. Completan el programa las obras ‘Serenata para cuerdas en mi menor’, de Edward Elgar; ‘Simple Symphony’, de Benjamin Britten; y ‘Le dernier sommeil de la vierge’ del Oratorio ‘La Vierge’, de Jules Massenet.

Para garantizar el cumplimiento de todas las medidas sanitarias, la Orquesta del Cantábrico ha reducido su formato y participará únicamente su sección de cuerda, compuesta por 12 músicos (siete violines, dos violas, dos violonchelos y un contrabajo), además de la directora y de la solista.

El aforo se ha limitado a 150 personas para respetar con todas las garantías la distancia de seguridad entre los espectadores y se ha solicitado inscripción previa para asistir como público, de manera que todas las personas que acudan al concierto podrán ser localizadas en caso de necesidad. Por su parte, la Orquesta se distribuirá a lo largo del Altar Mayor respetando también la distancia física entre los distintos componentes.

El Colegio de Economistas de Cantabria organiza, como cada año, el Concierto Solidario de Navidad, cuyos beneficios se destinarán a Cáritas Diocesana.

LA PRIMERA ORQUESTA PROFESIONAL DE CANTABRIA

La OSCAN es una formación fundada el año pasado por músicos profesionales vinculados con Cantabria. Bajo la batuta de Paula Sumillera, la primera cántabra que obtiene el título Superior de Música en Dirección de Orquesta, una treintena de músicos formados en diversos Conservatorios Superiores abordan el proyecto de dotar a la Comunidad Autónoma de su primera formación sinfónica profesional. “Cantabria cuenta con una profunda tradición musical y buenos músicos, pero ofrece escasas salidas profesionales. Consideramos muy importante dejar constancia de la necesidad de una mayor presencia de los músicos cántabros en la vida cultural de la región”, explica Paula Sumillera.

La creación de la OSCAN cubre además un vacío cultural en Cantabria, que era la única comunidad autónoma sin una formación orquestal de carácter profesional.

Para que el proyecto sea viable desde el punto de vista económico y organizativo, la Orquesta Sinfónica del Cantábrico se ha constituido como una agrupación sinfónica multidisciplinar y versátil en su capacidad de respuesta a las diferentes necesidades culturales de la sociedad actual. Así, cuenta con una plantilla capaz de adaptarse a interpretaciones en formatos reducidos, como este domingo en la Catedral, y de abordar actuaciones en festivales y grandes conciertos.

La Orquesta del Cantábrico nace como punto de encuentro entre los músicos vinculados con Cantabria y una población que carecía hasta ahora de una orquesta profesionalizada. “Creemos que en toda sociedad existen una serie de expresiones culturales cuyo consumo debe ser estimulado y facilitado a los ciudadanos. Y pensamos que la música clásica es uno de ellos”, precisa la directora de la OSCAN. “Queremos que la Orquesta Sinfónica del Cantábrico sea la palanca apropiada para rescatar el talento de nuestros jóvenes músicos, ofreciéndoles una referencia y una alternativa profesional de calidad de la que ahora carecen, evitando con ello un más que probable éxodo de capital cultural”.

Además de los apoyos puntuales de varias instituciones públicas, entidades culturales y empresas privadas, en estos momentos la Orquesta Sinfónica del Cantábrico cuenta con el mecenazgo permanente del Colegio de Economistas de Cantabria y las empresas Aspro y Virfran.

PAULA SUMILLERA

Desde que obtuvo su titulación en el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid, Paula Sumillera ha sido la primera mujer en ponerse al frente de diferentes agrupaciones profesionales, como la Orquesta Sinfónica de Burgos y la Banda Municipal de Música de Santander, entre otras.

También ha colaborado como directora invitada en la Orquesta Juvenil Ataúlfo Argenta y en el grupo de percusión del Conservatorio Teresa Berganza. Desde febrero de 2018 forma parte del pequeño grupo de alumnos del director de orquesta italiano Donatto Renzetti en el Curso de Perfeccionamiento en Dirección Orquestal de la Escuela de Alto Perfeccionamiento Musical de Saluzzo (Piamonte, Italia).