El Ayuntamiento de Santander pondrá a disposición de las familias necesitadas otros nueve pisos más en régimen de alquiler social a un precio medio de 180 euros, a las que podrán acceder mediante un sorteo, que se llevará a cabo en marzo de 2021, personas empadronadas en la ciudad cuyos ingresos sean inferiores a dos veces el IPREM.

Así lo ha anunciado hoy la alcaldesa Gema Igual tras visitar una de las viviendas situada en la calle Alta recién reformada, que consta de cuatro habitaciones, baño y cocina equipada con electrodomésticos.

“Debemos de ser muy sensibles para ayudar a los más necesitados, a las personas que se encuentran en riesgo de exclusión social y que tienen dificultades para acceder a una vivienda”, ha señalado la regidora santanderina, recordando que el Ayuntamiento dispone de casi 190 viviendas en alquiler, algunas desde hace años, utilizadas para realojos u otras situaciones difíciles valoradas por el equipo de Servicios Sociales.

Asimismo, ha aludido a otros 19 pisos en alquiler social a los que se accede mediante sorteo desde el año 2015, de los que formarán parte este año otros 9, distribuyéndose en marzo los cuatro primeros que son, además del de la calle Alta, otro en Cisneros, Marqués de la Hermida y calle Vargas.

Tal y como ha explicado Gema Igual, estos pisos han sido cedidos al Ayuntamiento por el Sareb, y el Consistorio se encarga de repararlos y acondicionarlos para que se encuentren en óptimas condiciones cuando lleguen los inquilinos. En concreto, el coste de la reparación del de la calle Alta ha ascendido a algo más de 18.000 euros y el resto suma en total 30.000 euros.

Según ha puesto de manifiesto la alcaldesa, “la vivienda es algo imprescindible para la autonomía, si se es joven para comenzar una vida y si se tiene familia para acoger al núcleo familiar”, por lo que desde el Ayuntamiento existen numerosos programas y medidas para favorecer su acceso a las personas con menos recursos económicos.

Entre ellas ha mencionado la construcción de vivienda protegida, con especial incidencia del alquiler con opción a compra, a través de la Sociedad de Vivienda y Suelo, que está construyendo 120 viviendas en San Román, de las cuales, 100 serán viviendas protegidas en régimen de alquiler a 10 años con opción a compra y las 20 restantes viviendas libres en venta con precio tasado y condiciones reguladas como si fuera una VPO; y otras 66 viviendas asequibles en la antigua parcela de Tabacalera, en la calle Alta, situada frente al Parlamento de Cantabria.

Asimismo, para favorecer la natalidad, el Ayuntamiento reduce en 100 euros el alquiler mensual a los inquilinos de las viviendas de la SVS por cada hijo que tengan o adopten y forme parte de la unidad familiar.

“Continuamos, además, apoyando a las personas y familias con menos recursos para que puedan acceder a una vivienda digna, así como a quienes tienen una vivienda pero se ven en riesgo de perderla por impagos de la hipoteca o del alquiler”, ha subrayado.

En este sentido, se ha referido a las ayudas que otorga el Ayuntamiento a través del Fondo de Emergencia Social, que se ha incrementado este año 800.000 euros hasta llegar a los 2,5 millones de euros y se otorga dos veces al año a aquellas personas o familias que necesitan un apoyo para hacer frente a gastos básicos, como la hipoteca, el alquiler o los recibos de agua, luz, comunidad, etcétera.

También ha recordado que el Ayuntamiento de Santander fue uno de los primeros en poner en marcha una Oficina de Mediación Hipotecaria, a través de un convenio con el Colegio de Abogados de Cantabria, un servicio que cubre tanto el asesoramiento y la orientación jurídica gratuita a casos de hipoteca, sino a los de posibles pérdidas de la vivienda por alquileres.

De otro lado, Igual ha relatado que otra de las vías de ayuda a colectivos con necesidades especiales a la hora de acceder a una vivienda es la Red Enlace, que pone inmuebles de propiedad municipal a disposición de diferentes entidades sociales para que gestionen alojamientos temporales a personas con dificultades de diversa índole.

A día de hoy, hay un total de 15 viviendas en esta red: dos pisos cedidos a Nuevo Futuro para familias monoparentales con cargas familiares; dos para Cruz Roja; uno para AMPROS y otros dos para la Fundación Obra San Martín, para que las personas con discapacidad den el salto a la vida autónoma; uno para la Asociación de Padres de Familia Separados, para que la vivienda no sea un impedimento para dar continuidad a las relaciones entre padres e hijos, custodias compartidas, regímenes de visitas, etc.; uno para la Cocina Económica; uno para Movimiento por la Paz, para la acogida temporal a personas solicitantes y beneficiarias de protección internacional; y uno para el centro Padre Menni para su programa de vida independiente dirigido a personas con enfermedad mental.