AIDA publica una guía para detectar posibles problemas en el neurodesarrollo de los niños
Guinea Bissau es uno de esos lugares donde a AIDA ‘se le ha perdido algo’. Sus proyectos de ayuda al desarrollo siguen adelante allí, y muchas veces a quienes echan un vistazo más de cerca es a los niños.
Este es el caso de una nueva iniciativa, que es la de publicar una guía que puede resultar útil para detectar, de manera precoz, si una niña o un niño pueden estar teniendo un problema en su desarrollo neurológico.
Sus compañeros de Cooperación Portuguesa están detrás, también, de esta guía, de ahí que haya salido, por el momento, sólo en el idioma de nuestro país vecino.
Se trata de una herramienta técnica que servirá de ayuda para profesionales sanitarios que trabajen en consultas pediátricas. Una manera de poder aprender formas sencillas de saber si puede haber algo que vaya mal o de una forma poco normal.
Se busca con esta guía desarrollar competencias clave para la identificación precoz de disturbios del neurodesarrollo como son la parálisis cerebral infantil, la microcefalia, la hidrocefalia, las síndromes genéticas, etc. La guía se ha escrito en portugués y se está distribuyendo en todas las áreas sanitarias de la capital del país.
La guía no sólo contiene directrices sencillas para poder detectar posibles problemas, sino que también incluye algunos dibujos que sirven para ilustrar maneras de comprobar que todo va bien.
AIDA EN GUINEA BISSAU
Desde Cantabria AIDA, a través de los fondos de la librería (AIDA Books & y del apoyo de instituciones como la Dirección General de Cooperación al Desarrollo del Gobierno de Cantabria, trabaja en proyectos de mejora de la asistencia sanitaria en estos países, donde tienen como delegado al cooperante cántabro Víctor Madrigal.
En Guinea Bissau han comenzado los trabajos para poner en marcha la nueva huerta escolar de la comunidad de Cambara Djaube, financiada por el Ayuntamiento de Santander. Las mujeres de la comunidad han sido las que han liderado las primeras tareas con la limpieza del terreno y la recolecta de arena y piedras para la construcción de pozos.
Esta actividad forma parte de un proyecto más amplio financiado por el Gobierno de Cantabria, que tiene como objetivo mejorar la calidad educativa y defender los derechos de la infancia en la zona fronteriza de Guinea Bissau.