La pandemia ha afectado a la hostelería de Cantabria en más de 6.500 empleos
La Federación de Servicios de Comisiones Obreras en Cantabria (CCOO) ha lamentado que la región haya perdido casi 2.000 afiliados a la Seguridad Social en el sector de la Hostelería en el último año, concretamente 1.861 según datos extraídos del Ministerio de Trabajo y Economía Social. Una cifra a la que, además, hay que sumarle otras 4.647 personas a 15 de enero de 2021 que, aunque estén dadas de alta en la Seguridad Social, se encuentran inmersas en un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), según los datos de la Secretaría de Estado de Seguridad Social y Pensiones, por lo que la pérdida real de empleo supera la cifra de 6.500 personas en este sector.
En este sentido, la afiliación a la Seguridad Social en el sector de la hostelería en Cantabria finaliza el año 2020 con una media de 13.950 personas afiliadas; es decir, un 11,77% menos que a finales de 2019, o lo que es lo mismo, 1.861 personas trabajadoras han perdido su empleo durante este año.
“El verano en Cantabria ha permitido apaciguar un poco la devastadora destrucción de empleo que sí se ha dado en otras comunidades autónomas. Sin embargo, las cifras son muy malas. La región no encabeza este ránking de comunidades que más afiliación han perdido en hostelería en el último año, e incluso estamos por debajo de la media española, con un descenso del 14,12% a nivel nacional, pero no es argumento para estar satisfechos. Hay que trabajar por recuperar esos puestos de trabajo perdidos y por dignificar un sector cuyas condiciones laborales dejan mucho que desear. No hay que olvidar que de las 8.126 personas en ERTE, 4.647 pertenecen al sector de la hostelería, un abrumador 57%”, ha señalado Marta Careaga, secretaria de la Federación de Servicios de CCOO en Cantabria.
No obstante, el sindicato ha querido subrayar la labor fundamental que ha desempeñado el instrumento de los ERTE generado a través del Diálogo Social para conseguir limitar la pérdida estructural de empleo, y ha incidido en la importancia de que se haya prorrogado tanto su vigencia como la de las prestaciones hasta el 31 de mayo.
“Los ERTE han evitado un impacto mucho mayor sobre el empleo y están permitiendo que muchas personas estén aguantando el tipo hasta que la crisis sanitaria se acabe. Es imprescindible que los ERTE se prorroguen por fuerza mayor mientras persistan los efectos de la pandemia y el sector pueda recuperarse”, ha insistido Careaga, que ha añadido “que es urgente que, en general, se aprueben nuevas ayudas para los y las trabajadoras de Cantabria; los de la hostelería no pueden esperar más porque su sector ha sido uno de los más castigados por la pandemia”.