La artista Ona Saumell organiza una muestra benéfica en el marco del Día Internacional de la Mujer, que podrá visitarse del 12 al 13 de marzo en CESINE.

Los beneficios serán donados a la Asociación Nueva Vida que brinda apoyo a mujeres víctimas de explotación sexual.
Se trata de una exposición, cargada de compromiso y reivindicación, en la que una joven artista, estudiante en el Centro Universitario CESINE, hace una reflexión sobre el mundo que le rodea y vierte una crítica hacia la desigualdad y la discriminación que sufren las mujeres en todo el mundo.

Women of the world es obra de la artista Ona Saumell y ha sido organizada en el marco del Día Internacional de la Mujer. En la muestra benéfica pueden encontrarse once obras realizadas en acrílico en las que la figura de la mujer destaca sobre un fondo negro, evocando la lucha de las mujeres por la igualdad.

Los beneficios de la venta de los cuadros serán destinados a apoyar a mujeres víctimas de trata, explotación sexual y en contextos de prostitución. Para ello, la artista se ha acercado a la ONG cántabra Nueva Vida que desde hace más de 20 años atiende a víctimas de explotación sexual.

“Ona se acercó a la ONG porque quería que su exposición, además de servir a la reflexión, tuviera un impacto real sobre la vida de las personas, en este caso, sobre la vida de mujeres que han sido víctimas de una violencia brutal”, relata el Coordinador de la ONG, Julio David García Justamante.

Asimismo, “para nosotras tenía mucho sentido vincularnos, en el marco del 8 de marzo, con el trabajo de una joven artista que, con su obra, quiere contribuir a reducir la opresión, la discriminación y la violencia que se ejerce contra las mujeres”, subraya García.

En Nueva vida atienden aproximadamente a un total de 400 mujeres víctimas de explotación sexual, algunas de las cuales son además víctimas de trata de personas. Llegan a Cantabria a través de una red de detección y protección, en colaboración con un cuerpo especializado de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y, una vez aquí, entran en un programa de atención social integral.

“Los programas de intervención social deben estar acompañados de campañas de sensibilización”, comenta García.

Sin embargo, aseguran que captar la atención de la gente más joven y conseguir que empaticen con temas como la explotación sexual “no es tarea fácil”. Por eso celebran que, en este caso, haya sido la propia artista quien se haya acercado a la entidad.

Creen que “esta colaboración puede animar a otros jóvenes a colaborar desde lo que ellos y ellas saben hacer, en algún proyecto social de su comunidad, de su barrio, apoyando a personas que se encuentran en situaciones de extrema vulneración de sus derechos humanos”.