El Ayuntamiento de Santander avanza en el proyecto para conectar las bocas del antiguo Túnel de Tetuán con los carriles bici de Puertochico y el Sardinero, según ha anunciado el concejal de Movilidad Sostenible, César Díaz, quien ha detallado que la Junta de Gobierno Local ha aprobado hoy el proyecto constructivo, que contará con un presupuesto base de ejecución de 384.680 euros y un plazo de cuatro meses.

“Continuamos impulsando la red de carriles bici en Santander y en este caso con un proyecto de especial importancia porque nos va a posibilitar reforzar la comunicación entre el Sardinero y el centro a través de un trazado singular y que dará servicio a importantes centros de actividad administrativa, deportiva, turística y residencial”, ha destacado.

Díaz ha asegurado que el principal condicionante ha sido buscar un trazado seguro y funcional, que fuera lo más directo posible entre los puntos de origen y destino, y finalmente se contemplan dos tramos, de unos 920 metros de longitud en la calle Tetuán y de 430 metros en Joaquín Costa.

El responsable municipal ha explicado que el proyecto define las obras necesarias para completar el eje ciclista entre las dos entradas al túnel con los itinerarios ciclistas más cercanos: en la boca sur, con el carril de Puertochico a su paso por Casimiro Sainz (recorrido plaza de Amaliach – plaza de Alhucemas); y en la boca norte, con el carril de Reina Victoria (recorrido desde mitad de la calle Joaquín Costa).

“Llevamos tiempo apostando por la sostenibilidad y por reforzar la movilidad activa dando garantías de seguridad a los ciclistas y mayor protagonismo al peatón”, ha destacado Díaz, que ha hecho alusión al impulso municipal llevado a cabo en la red de carriles bici en los últimos meses.

Como ha recordado, antes de la pandemia, Santander contaba con 28 kilómetros de carriles bici. En el último año, se han desarrollado 5 más (nuevos carriles de Reina Victoria, Alcalde Vega Lamera, Nueva Montaña-PCTCAN y el nuevo ramal Parque de la Marga-Valdecilla Sur) que han permitido ampliar la red hasta los 33 kilómetros y cerrar el anillo ciclista de la ciudad que permite bordear el núcleo consolidado de Santander.

A este proyecto para conectar el túnel de Tetuán con los carriles más próximos se suman otras actuaciones en marcha o de próxima ejecución relacionadas con la infraestructura ciclista, como la mejora del carril bici de Antonio López y su ampliación hasta la Biblioteca Central, -enmarcado en las obras de derribo de los tinglados portuarios y acondicionamiento de la calle iniciadas la pasada semana-; el nuevo carril que atravesará la calle Manuel Ruiz de Quevedo, cuyas obras comenzarán este verano; la colaboración con el Gobierno de Cantabria para conectar Santander con Bezana a través del puente atirantado sobre la S-20; o el futuro itinerario ciclista de General Dávila, que se está analizando en el marco del Plan Director de este importante eje viario de la ciudad.

TRAZADO Y OBRAS

El tramo de Tetuán comenzará en el paso de peatones de la plaza de Amaliach, junto a la glorieta de La Pescadora, y partirá en dirección este hasta la glorieta Tetuán, situada en la intersección entre las calles Tetuán, La Montañesa y Padres Escolapios.

A partir de ahí continuará por la acera sur de la calle Tetuán hasta llegar al aparcamiento existente junto al centro de salud, entre los cruces con las calles Pedro Ceballos Guerra y Alejandro García, donde cambiará a la acera norte hasta llegar a la plaza de Alhucemas, punto final del tramo.

El tramo del Sardinero, por su parte, comenzará en la acera norte de la avenida Reina Victoria, -a la altura del número 153-, (frente al acceso a La Primera playa). Desde este punto, cruzará por el paso de peatones existente (que será necesario adaptar) y proseguirá por la acera, ocupando parcialmente el espacio destinado actualmente a aparcamiento de motocicletas. Seguirá por la acera este de Joaquín Costa hasta enlazar con el vial de acceso al túnel.

El proyecto incluye los trabajos previos necesarios para hacer efectivo el trazado, -tales como la demolición de tramos de calzadas y acera, retirada de parterres, desmontaje de elementos del mobiliario urbano-, y la posterior construcción (a base de mezcla bituminosa coloreada, tanto a cota de acera como de calzada), reposición de aceras y elementos afectados, y señalización.