Pasaje Seguro convoca este domingo concentración reivindicando una nueva normalidad «de acogida» y «sin odio» a refugiados
Bajo el lema 20J Día Mundial de las Personas Refugiadas: TODOS LOS DERECHOS, Pasaje Seguro quiere llamar la atención sobre la necesidad del reconocimiento de los derechos de las personas migrantes con las que convivimos. Quiere también llamar la atención sobre los riesgos «inadmisibles» que tienen que padecer quienes intentan acceder a la Unión Europea (UE) desde nuestras fronteras.
A día de hoy, más de 75 millones de seres humanos viven desplazados forzosamente de sus hogares, por causa de la guerra, por el hambre y la pobreza, por sus opiniones políticas o religiosas, por su género y orientación sexual, por los desastres ambientales. El 80% de estas personas se encuentra en países vecinos a los suyos, que tienen también graves problemas económicos y alimentarios. El 40% son niñas y niños.
Según recuerdan, muy pocas de estas personas acceden a nuestras fronteras, y cuando lo hacen las encuentran cerradas: «se les niegan los visados, se les impide el derecho que tienen de acceder a un procedimiento seguro de asilo y refugio; derecho reconocido en las leyes internacionales, las de España, y las de la UE, se les deja en manos de delincuentes y muchos se ahogan en el Mediterráneo y el Atlántico, se derraman lágrimas de cocodrilo cuando las víctimas inundan los telediarios, y nuestros gobernantes echan la culpa a las mafias, cuando son ellos los que han impedido que tengan acceso a un billete y a un visado».
«El incumplimiento de los deberes de asilo y refugio continúa con los que consiguen llegar», prosiguen, incidiendo en que en Canarias se les concentra en campos en vez de permitirles la libre circulación por España, y el acceso a los otros países europeos a los que pretenden llegar. En Ceuta se deporta a niños migrantes, contraviniendo todo lo que se puede contravenir.
Mientras, «muchas de las personas migrantes que ya viven y trabajan aquí, lo hacen en condiciones de semilegalidad, lo hacen muchas veces sin la asistencia sanitaria que les arrebató el PP, y que el actual gobierno sigue sin restituir completamente». También, agregan, tienen que sufrir demasiados ataques de nuevos y antiguos racistas, que quieren mano de obra esclava y sin derechos. «Estas personas han sido imprescindibles y solidarias durante la pandemia. Han cuidado a nuestros mayores y a nuestros niños, han recogido las cosechas sin medidas de seguridad suficientes frente al Covid, limpian nuestras casas», reivindican.
«Cambiar nuestras malas políticas migratorias, sustituirlas por políticas solidarias de acceso y de acogida es una necesidad para poder abordar una nueva normalidad con igualdad de derechos, con convivencia y sin odio. Es también la demanda social que manifiesta la solidaridad expresada en la acogida ciudadana a los niños de Ceuta, en los grupos ciudadanos de apoyo a los migrantes varados en Canarias, en las agrupaciones ciudadanas que facilitan apoyo legal y emocional a los solicitantes de asilo», expresan.
Por eso, exigen:
- Vías seguras de acceso a las personas migrantes que tratan de acceder a España y la UE, eliminando los riesgos inadmisibles de morir en desiertos, mares, y fronteras
- Cumplimiento estricto de la legislación de asilo y refugio a la que España está obligada. Normalización y acortamiento del sistema de citas, gestión y resolución de expedientes.
- Apertura de un proceso de regularización inmediata de las personas migrantes sin papeles residentes en España.
- Recuperación total de la asistencia sanitaria pública para las personas migrantes, asegurando su acceso al proceso de vacunación.