Las bajas temerarias y sus consecuencias no se producen sólo en las contrataciones públicas: Circet Clableven, la subcontrata de Vodafone que no quiere mantener a la plantilla de la anterior empresa, consiguió el contrato de su servicio de instalación y mantenimiento de telecomunicaciones a cliente tras ofrecer bajar un 25% los costes respecto al anterior, en manos de Zener Plus.

Así se lo han explicado los delegados de personal de CC.OO., Emilio López, Iván Ruiz, junto al trabajador Mauricio Tirado, al presidente del Parlamento, Joaquín Gómez, dentro de la ronda que están haciendo para exponerles su situación a distintos representantes institucionales (como, ayer, el director general de Trabajo, Gustavo García).

En detalle, Zener Plus tenía unos cuarenta empleados, algunos de ellos temporales que extinguieron sus contratos, y en el cambio otros que han aceptado las condiciones muy por debajo del convenio que les ha ofrecido la nueva adjudicataria.

Ahora mismo hay 22 trabajadores de la subcontrata de Vodafone que han quedado abandonados porque la nueva empresa adjudicataria se niega a subrogarles manteniendo sus condiciones, como obliga el convenio.

Así lo establece la Cláusula de Estabilidad en el Empleo de Contratas y Subcontratas recogido en el artículo 74 del Convenio Colectivo del Sector de la Industria Siderometalúrgica de Cantabria, que señala que «si a la finalización del contrato de mantenimiento o servicio industrial entre la empresa contratista y cualquier cliente público o privado, las funciones totales o parciales de mantenimiento o servicio se continuasen por otra empresa, los trabajadores de la empresa cesante por esta causa tendrán derecho a pasar a la nueva adjudicataria, la cual se subrogará en los derechos y condiciones de los mismos».

Pero la nueva adjudicataria de Vodafone se niega a cumplir ese compromiso y ha colocado a los trabajadores “en un limbo legal, porque no están despedidos y la otra empresa tampoco les da trabajo”, ha denunciado Jesús Gallo, secretario de acción sindical de Industria de Comisiones Obreras, presente en la reunión.

Los trabajadores han recurrido al presidente del Parlamento “para poner la situación en conocimiento de los ciudadanos y reclamar apoyos que puedan contribuir a solucionarla”, ha declarado Gallo.

El presidente del Parlamento se ha solidarizado con sus demandas y ha subrayado que “este es uno de los problemas que plantea la reforma laboral que permite firmar convenios de empresa por debajo de los convenios del sector, abaratar costes a costa de que las personas trabajen en condiciones menos dignas”.

De momento, Zener Plus sigue notificando bajas a sus trabajadores sin que Circet se haga cargo de ellos y sin que Vodafone intermedie para hacer cumplir lo que establece el convenio.

De hecho, ni Circet ni Vodafone se están presentando a las citas con el Organismo de Resolución Extrajudicial de Conflictos Laborales (ORECLA), abandonando a todas estas personas que se encuentran de buenas a primeras sin su puesto de trabajo y que ya han comenzado, de manos de Comisiones Obreras, a demandar su situación en los juzgados, además de a preparar movilizaciones.

Comisiones advierte de que la no subrogación es una práctica habitual de la empresa Circet y que no es la primera vez que pasa algo similar no sólo en Cantabria sino también en otros territorios. En otra ocasión, Circet también se negó a subrogar a los trabajadores de Zener Comunicaciones cuando trabajaban para Orange.

El mecanismo pasa por la renuncia a formar parte del convenio para, en ocasiones, ser contratados después, sin la subrogación, pero con salarios más bajos.