Diestro ha reprochado además a la Consejería de Sanidad su «falta de comunicación con los ayuntamientos» afectados por los diferentes niveles de riesgo y las consecuentes restricciones. «Llevamos meses demandando que se comunique individualmente a cada municipio la situación sanitaria, las restricciones que conlleva y las medidas que deben tomar, para poder dar explicaciones a los vecinos y los sectores económicos afectados por las restricciones», ha afirmado el Presidente de la Federación.

«Sin embargo, tenemos que enterarnos a través de los medios de comunicación, sin que nadie nos llame para indicarnos qué tenemos que hacer o cómo afecta a nuestro municipio», ha lamentado. Así, ha indicado que esta semana son 19 los municipios que han entrado en nivel 3 de riesgo y «no parece demasiado complejo ponerse en contacto con esos ayuntamientos para comunicar la nueva situación y explicar qué deben hacer ahora».

«Esto también es municipalismo, que se cuente con los ayuntamientos y que las administraciones actuemos de forma coordinada para afrontar esta difícil situación», ha subrayado el presidente de la FMC.

Respecto al Semáforo COVID, Pablo Diestro apunta que, a medida que ha ido evolucionando la situación, «no tiene demasiado sentido» porque «somos una Comunidad Autónoma muy pequeña y, sobre todo ahora en verano, hay muchísima movilidad». Las restricciones solo a nivel municipal «no contribuyen a mejorar sustancialmente la situación de la pandemia en Cantabria», ha valorado.

Igualmente, considera necesario revisar las restricciones establecidas para cada nivel de riesgo, porque se definieron en una situación «muy diferente a la que tenemos ahora». En este momento, la mayor incidencia de los contagios se produce entre los grupos de edad más jóvenes, que están aún sin vacunar y que tienen mucho contacto social.

Por eso, medidas como el cierre de los interiores de la hostelería, ha expresado Diestro, «creemos que va a tener una repercusión mínima a la hora de frenar el aumento de la incidencia y, en cambio, en plenos meses de julio y agosto, tendrá una repercusión económica brutal», máxime cuando «coincide que se va a cerrar en los municipios más turísticos de Cantabria».

El Presidente de la Federación de Municipios ha remarcado que el Gobierno de Cantabria y la Consejería de Sanidad siempre encontrarán en los ayuntamientos «una mano tendida a la colaboración y la búsqueda de soluciones», pero entienden que se pueden acordar «medidas ponderadas», que cumplan su objetivo de mejorar la situación sanitaria de los municipios y garantizar la salud de los vecinos causando los menos perjuicios posibles a sectores económicos ya muy dañados.