El sabor de lo clásico regresa a Torrelavega con Sobaos Arce
El 7 de agosto Sobaos Arce abrió las puertas de una renovada tienda y obrador en el callejón de la Avenida de España de Torrelavega. Han sido meses de esfuerzo y de preparación midiendo y valorando cada detalle. Nada está improvisado: la estética del espacio, la luz, el logo, incluso la estrategia en redes sociales para, no solo anunciar la apertura, sino para dar también a conocer aspectos de esta renovada marca local.
La empresa está formada por los hermanos Fernández Arce: Javier, Ana y Raquel, hijos de Cioni Arce, cofundadora del antiguo obrador en 1987 y artífice de un negocio que se convirtió en referencia absoluta para todos los torrelaveguenses. Mantener vivo ese legado es el principal objetivo de Sobaos Arce. Para ello, Ana y Raquel trabajan estos primeros días de andadura sin parar. “Mi hermana y yo estamos 13 horas diarias en el obrador”, asegura Ana, que se muestra agradecida por el apoyo recibido y la afluencia masiva de clientes. “Las colas el día de la apertura doblaban la esquina hasta la Avenida de España”, recuerda.
La empresa apuesta por el producto de proximidad: “La leche es de Cantabria, nos la trae una ganadería cercana. Apostamos por la calidad y por el producto local”, afirma Ana. Los clientes recuerdan los viejos tiempos al visitar la tienda: “Nos dicen que se acuerdan de haber venido de niños o con sus hijos y les ha encantado el nuevo diseño”.
La estrategia en redes sociales ha sido importante, recalca Juan Herrería, responsable de esta: “Es un trabajo en equipo entre todos los integrantes de la familia, todas las piezas encajan porque tenemos perfiles absolutamente complementarios ”. El logo combina innovación y tradición: representa a la pequeña de la familia con las gafas de Cioni y, según comentan, “ha gustado tanto que nos han pedido camisetas y sudaderas».
El trabajo de adecuación y ordenación del espacio lo han realizado Javier y su cuñado Esteban, que han conseguido cuadrarlo todo en los algo menos de 40 metros cuadrados con los que cuenta el local. “Esa conjunción de factores ha hecho que el engranaje funcione y que todo haya resultado un éxito”, afirma Juan.
Una empresa familiar, histórica y siempre recordada por tantos locales y visitantes que durante décadas han disfrutado del sabor de los sobaos de Cioni Arce y que ahora recuperan con un proyecto basado en el talento, el esfuerzo y la pasión por la calidad.