La Fiscalía de Cantabria destaca en su memoria anual el responsable comportamiento de los menores ingresados en centros de acompañamiento durante las complicadas fechas del confinamiento, un tiempo durante el cual no se notificó por parte de los responsables de los distintos centros ninguna incidencia ni sanitaria ni referida a posibles fugas o conflictos en los centros. «se consiguió que los menores se adaptaran en sus rutinas diarias, especialmente estudios, a los cambios implantados por la nueva realidad, desarrollando telemáticamente en contacto con los centros docentes los programas educativos correspondientes.»

En relación con los Menores Extranjeros no Acompañados, la Fiscalía constata el descenso de su número en nuestra comunidad. Así, 2020 se inició con 94 chicos y chicas atendidos en los diferentes centros, frente a los 119 con lo que arrancó el año previo. Además, a lo largo del año pasado se redujo el número de menores  que llegaron a Cantabria, lo que supuso la reducción del número de plazas y recursos en la red de centros hasta el extremo de que tres de ellos cerraron sus puertas reubicando a los residentes en los cinco que siguen operativos

Por tanto, el total de Menas atendidos en 2020 sumando los nuevos ingresos, a los que permanecían de años previos, han sido 188, cifra sensiblemente inferior a los 208 de 2019, destacando la Fiscalía «el gran trabajo que en los mismos se ha realizado por todo el equipo de educadores».

Por nacionalidades, un año más los marroquíes constituyen el grupo más numeroso si bien a partir de octubre y hasta final de año el número de Menas albaneses ha sido el más elevado, siendo localizados todos ellos en la zona del Puerto de Santander, en la zona de la Estación Marítima y portando la inmensa mayoría de ellos documentación en regla de su país de origen, bien Carta de identidad o Pasaporte, según consta en la Memoria Fiscal, que añade que «se trata de menores que se encuentran de paso por nuestra Comunidad y su propósito es, o bien embarcar en el ferry con destino a Reino Unido como polizones (lo que intentan realizar tanto desde Santander como desde el puerto de Bilbao), o bien dirigirse a otras Comunidades Autónomas».

CENTROS DE MENORES NO ACOMPAÑADOS

Todos los centros de Cantabria que atienden a Menores Extranjeros No acompañados lo hacen ofreciendo programas de  educación afectivo-sexual, de prevención de drogodependencia, de entrenamiento de habilidades sociales (programa de competencia psicosocial “Jabato”), de prevención del malestar y la violencia, y de preparación para la autonomía (programas “Jabato” y “Umbrella”).

Destaca la Fiscalía que durante el confinamiento, «Se ha procurado reforzar la creación de un ambiente hogareño y cálido, reorganizando actividades, ritmos y rutinas ayudándose de materiales de entretenimiento, uso racional de la televisión, proyección de películas adecuadas, videojuegos, internet, procurando, en todo momento, orientar a los menores residentes en su uso responsable y adecuado de estos últimos».