El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, Daniel Fernández, ha denunciado que el proyecto de renovación de varias calles del Sardinero «abusa de hormigón y granito», por lo que supone «una amenaza al aire clásico y, por lo tanto, al conjunto histórico de una de las zonas más emblemáticas de la ciudad».

En una nota de prensa, Fernández considera que «está plenamente justificado el miedo que tienen los vecinos del Sardinero a estas obras, porque «abundan en el historial de piqueta, loseta y granito que caracteriza a las intervenciones de renovación urbana del PP como la última de Plaza de Italia».

En concreto, tras estudiar en detalle el proyecto, el Grupo Socialista cree que las obras que acaban de comenzar «abusan del hormigón y del granito» y «rompen el aire clásico» del conjunto histórico-artístico del Sardinero, como lo trasladó la semana pasada a distintos colectivos concienciados en la defensa del Patrimonio en la ciudad.

Para el portavoz socialista, este tipo de intervención «no está justificada» y «crea lógica alarma» entre los vecinos, que «tienen miedo cada vez que el PP pone la diana en sus barrios» por «un historial de atrocidades urbanísticas, como la última de la Plaza de Italia, o la que tenían planificada en el Dique de Molnedo y conseguimos frenar en el Pleno».

Según Fernández, las obras en el conjunto de calles Duque de Santo Mauro, María Luisa Pelayo, Luis Martínez (este), Ramón y Cajal (este) y González de Riancho, Teniente Fuentes-Pila, Calatayud, Rocío, y la Travesía de Pérez Galdós deberían «recuperar el pavimento existente o buscar uno similar, como sí se ha hecho en actuaciones previas más modestas».

Además, ha recordado que «una vez más estamos ante unas obras adjudicadas con un 40% de baja sobre el precio de licitación», con lo que «vuelve a reproducirse el esquema de obras baratas que después terminan saliendo más caras a través de modificados que se podían haber previsto, y que suman en total ya más de 3,5 millones de euros esta legislatura».

Por todo, Daniel Fernández ha urgido al edil de Urbanismo, Javier Ceruti, a crear el Consejo de Patrimonio, tal y como se aprobó en el Pleno de junio, para «evitar que el PP siga actuando de espaldas a la ciudadanía», «sin la opinión de expertos en patrimonio y en la historia de la ciudad».

«El Consejo de Patrimonio es un órgano consultivo, que sin ser vinculante es fundamental para respetar la identidad de Santander, porque permitirá a los vecinos y a los expertos en patrimonio conocer los proyectos con anterioridad al inicio de las obras y emitir informes con recomendaciones para las actuaciones de reforma», ha recordado.

La moción impulsada por los socialistas planteaba «a título propositivo pero no limitativo» la incorporación de entidades como el Colegio de Arquitectos, el Centro de Estudios Montañeses, el Grupo Alceda, Hispania Nostra, la Plataforma DEBA o la Red Ibérica de en Defensa del Patrimonio Gráfico.

También instaban a desarrollar un Reglamento de Organización y Funcionamiento del consejo «a la mayor brevedad posible», en el que «figuren sus atribuciones para conocer y supervisar los proyectos de obra pública en la ciudad de Santander, sean de rehabilitación, renovación o reforma, que supongan importantes alteraciones de la trama, la arquitectura o el paisaje urbano, así como su principal competencia para emitir recomendaciones e informes consultivos no vinculantes».