Iniciativa Cantabria Sostenible considera que el proyecto de la nueva ley del suelo enmascara el «fracaso» de los políticos que no saben cómo gestionar el medio rural, lo que creen que demuestra la «incapacidad continuada a lo largo de 40 años de autogobierno, de dotar a Cantabria de un modelo económico digno, moderno y sostenible».

Explican que el urbanismo está concebido para la ordenación de ciudades y pueblos, que son el 5% del territorio, y creen que  esta ley comete el error fundamental de utilizar el urbanismo para invadir lo que no es su competencia: «la gestión del espacio rural, que supone el otro 95% del territorio».

Desde Iniciativa Cantabria Sostenible, recuerdan que las competencias en el suelo rural corresponden a los técnicos agrícolas, forestales, geógrafos, ecólogos, biólogos…etc…, pero no a los urbanistas: por lo que, consideran que  su gestión debe de abordarse desde la ordenación del territorio y no desde el urbanismo. «Los urbanistas deben limitarse al espacio urbano y evitar inmiscuirse en el espacio rural, que ni conocen ni comprenden, poniendo en peligro con sus actuaciones los frágiles equilibrios que se han venido manteniendo durante siglos».

Por eso, están convencidos de que la nueva ley presentada al parlamento se enfrenta al suelo rústico en negativo y no en positivo, como debiera de hacer. Explican en una nota de prensa que abordar el medio rural desde el urbanismo, «constituye una amenaza de consecuencias irreversibles para el suelo fértil de la comunidad, ya que su importancia estratégica lo convierte en un suelo irreemplazable para las generaciones  futuras, que dependerán de su valor agrícola, ganadero, forestal, de su biodiversidad y sus servicios ecosistémicos, tal y como han dependido las generaciones pasadas y nos han sabido transmitir a las generaciones actuales».

Añaden en sus argumentos que si una comunidad como Cantabria no reserva y mantiene espacio natural y fértil para la producción de alimentos y la conservación de la biodiversidad, está destinada al colapso. «La ley
va a la deriva porque desconoce hacia qué modelo económico se orienta, y cuáles van a ser sus consecuencias. De lo que se desprende que esta ley del suelo se ha hecho al servicio de las expectativas coyunturales y a corto plazo de una minoría, a costa de perjudicar para siempre a toda la comunidad».

Creen además, que esta ley sitúa a Cantabria a la cabeza de la involución territorial, ya que consideran que es  contraria a las directivas europeas, la normativa estatal y la de las demás comunidades autónomas: «como los políticos cántabros no saben qué hacer con el espacio rural, han optado por su liquidación definitiva, mediante el hormigonamiento y destrucción irreversible».

Insisten en que los hechos demuestran que tras la entrada en la Unión Europea hace 35 años, «los responsables políticos de los diferentes partidos en Cantabria, no han sido capaces de dar una alternativa económica moderna y en positivo al medio rural, que garantice su rentabilidad productiva en las circunstancias de la nueva realidad sobrevenida».

Creen que si desde la incorporación a la Unión Europea el anterior modelo económico ha caído, hay que encontrar un nuevo modelo productivo que adaptándose a las nuevas necesidades, garantice la conservación del suelo fértil.» Lo que resulta irresponsable e inadmisible hoy en día, es optar por destruir un recurso estratégico promoviendo un uso incompatible, porque no se sabe qué hacer con él».

Iniciativa Cantabria Sostenible insiste en que según las tendencias europeas actuales, el espacio rural ha de ser multifuncional, y no de monofunción urbanística y turístico-residencial, por ser contrario a su naturaleza. Recuerda que el mundo rural ha sobrevivido siempre cuando ha tenido una actividad productiva rentable que ha vinculado a la tierra a sus habitantes. C»uando esa actividad productiva decae, y los responsables políticos son incapaces de establecer un nuevo modelo compatible, sobreviene el caos y la desvinculación que la actual ley del suelo pretende consolidar».

Concluyen proponiendo que se busque un nuevo modelo productivo para el medio rural de Cantabria que sea rentable y acorde con su naturaleza, y se abandone definitivamente la persistente irregularidad de pretender gestionarlo desde el urbanismo.

INICIATIVA CANTABRIA SOSTENIBLE

La plataforma Cantabria Sostenible está formada, además de ARCA, por Cantabristas, Cantabria no se Vende (CNSV), Madres por el clima, Red Cambera, Nuevo Modelo Energético (Noda Cantabria), Asamblea en defensa de las Excavadas, Verdes EQUO Cantabria, Asamblea Ciudadana Por Torrelavega (ACPT), Ecologistas en Acción, IU, el sindicato STEC, Centinelas, Asociación Ría, Podemos, Asociación Hispania Nostra y Unión de ganaderos y agricultores montañeses(UGAM-COAC).

Iniciativa CANTABRIA SOSTENIBLE nace para promover el debate social entre la población, entidades, grupos y asociaciones de todo tipo, ante la grave y preocupante coyuntura a la que se enfrenta Cantabria de progresiva involución territorial, económica y ambiental. Iniciativa Cantabria Sostenible propone y somete a consideración las siguientes propuestas:

1º Retirada del actual proyecto de Ley del Suelo para Cantabria, y derogación de la disposición transitoria 9º de la Ley 3/2.012, que permite la construcción de viviendas aisladas en el suelo rural de la comunidad: disposición frontalmente contraria a las directrices europeas sobre gestión sostenible del suelo rural, y a los principios más básicos de la ordenación territorial y la disciplina urbanística.

2º Realización de un Plan Regional de Ordenación del Territorio que deje de articular el suelo rural desde el urbanismo, y valore en positivo el suelo rural de Cantabria de acuerdo a su naturaleza y función: por su importancia en la conservación de la biodiversidad, su fertilidad para la potencial producción agroalimentaria ganadera y forestal, por el valor cultural, patrimonial y turístico de su paisaje, y por ser el soporte básico para futuras infraestructuras.

3º El establecimiento de un modelo económico consensuado a largo plazo, diverso, estable, sostenible y digno para Cantabria, que priorice los sectores industrial y primario y abandone los excesos que se están produciendo y pretenden cometer en la construcción dispersa y desordenada, las obras públicas desmesuradas y el turismo masivo.