Waahi, la tienda que vende muebles elaborados de forma sustentable y a medida, ha dado un paso más en el proyecto, ampliando el taller.

El taller estará en Gama y entre las posibilidades que les permite –aparte de mejoras en la conciliación del equipo, parte importante dentro de la filosofía de Waahi-, está la de sumar “mayor complejidad” a los proyectos.

Según explica a EL FARADIO Víctor Gutiérrez, de Waahi, estas posibilidades permiten dotarse de una zona de almacenaje por si alguien ha encargado muebles pero todavía no tiene la vivienda lista, o tener productos en stock, como los “estrella”, es decir, las bancas o las mesas, para su enviío entre 48 y 72 hofras.

“Somos una marca orgullosamente cántabra dedicada a muebles artesanos y personalizables y ropa, totalmente sustentables”, con certificados de sustentabilidad y de Cantabria, señala Víctor.

La materia procede de proveedores locales, de maderas como el pino, ya que el roble o el haya son “escasas” y acaban elevando los precios.

“Al final del día buscamos que la persona se lleve a casa un mueble práctico, estético y sostenible”, recalca Víctor, que detalla que se cuenta con un catálogo inicial entre el que se puede elegir, y al que se suma también la posibilidad de proyectos a medida en base a las indicaciones que se den y con su orientación en el proceso.

Una de las opciones que se les vienen abriendo es la reutilización de maderas de las propias casas en las reformas: por ejemplo, una cuadra “de toda la vida” de ganaderos en Argoños, cuyas vigas tienen más de 200 años que “vamos a tratar para convertir en mesas para toda la familia”.

“Reivindicamos a los carpinteros de toda la vida, con más canales y medios, pero queremos ser la tienda de barrio, ver el proyecto a calzón quitado y a partir de ahí, jugar”, añaden.

EL PROYECTO

Estas navidades  tuvo lugar la inauguración del nuevo espacio Waahi, situado en la calle Cádiz de Santander.

Tras un año desde que comenzó su actividad, el negocio cántabro cambia de local con la intención de seguir creciendo en la ciudad.

Waahi, o lo que es lo mismo, espacio en maorí, nació en un 2020 fruto de dos familias, amigos desde la infancia que crecieron juntos en  Cantabria.

El tiempo hizo que Víctor Gutiérrez emigrase a México a trabajar pero a los diez años regresó a su tierra. La amistad permaneció, pero las aspiraciones laborales de cada uno cambiaron con la llegada de la pandemia de la Covid-19.

Fue entonces cuando decidieron darse la oportunidad de crear una marca con olor a Cantabria uniendo el talento de Agustín para la creación del mobiliario, el de Daniela para crear una imagen y una estética de marca que les representase, y el de Víctor que llegó a Waahi con una amplia experiencia en consultoría de empresa, dirección y emprendedor de negocios a lo largo de su carrera laboral.

La marca ve la luz en ese momento con una identidad muy marcada, basada en el respeto a su tierra, Cantabria, sus orígenes, y el respeto a los valores sociales.

Agustín, justo antes de la pandemia, se enfrentó a la relocalización de la empresa en la que trabajaba lo que le deja en situación de desempleo.

Por su parte, Daniela, Mexicana de nacimiento, a pesar de contar con un currículum impecable como profesora de universidad y bachillerato internacional, le fue realmente complicado encontrar un trabajo.

En el caso de Víctor, el problema para encontrar un empleo en Cantabria fue la sobrecualificación para muchos de los puestos que se generan en la comunidad

Ante esta cruda realidad todos aunaron fuerzas y decidieron emprender con la creación de Waahi para sacar adelante a sus familias.

En Waahi se trabaja la madera y el hierro con diseños innovadores y personalizados. Además ha creado una línea de ropa cuya confección es 100% tradicional donde se fusiona diseño y calidad sin perder de vista una vez más su compromiso social.