El ‘banco malo’, la SAREB, creada para concentrar los activos tóxicos –los créditos de viviendas no pagadas—del sector financiero, cuya deuda acaba de pasar a manos del Estado, suma unas mil de viviendas en Cantabria.

En concreto, según detalla la propia entidad, la SAREB (Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria) tiene en Cantabria un total de 983 viviendas.

A las que suma 215 obras en curso, 588 suelos, 114 bienes para fines terciarios (comerciales) y 1288 anejos.

Estos bienes se comercializan a través de las empresas Altamira Asset Management (ligada al Banco Santander), Haya Real Estate, Servihabitat o Solvia.

En el caso de las viviendas de obra nueva, una parte de estos proyectos se traspasaron a Árqura Homes y pueden consultarse a través de la página web de Aelca, el gestor encargado de su venta, una empresa inmobiliaria creada en plena crisis que acabó evolucionando a ser propiedad de Värde, un fondo estadounidense que comercializa cinco inmuebles en Cantabria, tres pisos y dos locales que se mueven entre los 132.000 y los 186.000 euros.

EL RESCATE DEL RESCATE..

En la anterior crisis financiera se produjo el famoso rescate público con inyecciones económicas al sector financiero, fundamentalmente a las cajas, por valor de 65.725 millones de euros.

Aparte, se creó la SAREB, el conocido como ‘banco malo’, que concentró los denominados activos tóxicos, esto es, los créditos no cobrados y los inmuebles sin pagar que amenazaban los balances de la banca, en el que participaban el Estado y el sector bancario.

Hace dos semanas, el Consejo de Ministros aprobó en su reunión semanal un Real Decreto que modificaba su régimen jurídico de forma que el peso del Estado podrá superar la mitad de la composición del banco, parte de la operación que queda por formalizar y que podría sumar deducciones fiscales a las entidades que vendan y se desprendan así de su participación en una entidad endeudada, consumándose así la nacionalización ‘de facto’ de la SAREB.

El ‘banco malo’ ya había sido reclasificado por Eurostat, la oficina estadística de la Unión Europea, como perteneciente a las administraciones públicas –por tanto, su deuda, 35.000 millones, pasó a ser deuda pública–, aunque sin la condición de empresa pública estatal y quedando bajo la supervisión del Banco de España.

…QUE ABRE POSIBILIDADES AL PARQUE PÚBLICO DE VIVIENDAS

Con el cambio–al que le queda tramitación parlamentaria y, por tanto, la posibilidad de algún tipo de añadido vía enmiendas– se confiaba en poder incorporar a su estructura el “impacto social”, “ reforzando su capacidad de colaboración con organismos públicos y entidades no lucrativas con experiencia y competencias en el ámbito de la vivienda social”.

En el mismo Consejo de Ministros se aprobaba el Plan de Vivienda, que en lo relacionado con la SAREB se marca el objetivo, a través del Programa 9, de incrementar la oferta de vivienda en alquiler social mediante el impulso de la puesta a disposición de viviendas de la SAREB y de entidades públicas a las comunidades autónomas y entidades locales, así como a sus entidades vinculadas o dependientes para que sean destinadas a dicho alquiler social.

Convenios similares se han firmado en el pasado, como los que afectaron a una treintena de viviendas en Ganzo (Torrelavega), destinadas a VPO.