Las mujeres con pensión contributiva en Cantabria cobraron de media 497,33 euros menos que los hombres
Comisiones Obreras de Cantabria (CCOO), coincidiendo con el Día Internacional de las Mujeres el 8 de marzo, ha querido hacer un análisis de las brechas que se perpetúan en las pensiones tanto contributivas como no contributivas en la región. La primera conclusión que se extrae de este estudio es abrumadora: a pesar de que más de la mitad de las personas que tenían pensión contributiva en 2021 (143.721) eran mujeres (51,58%, 74.132 concretamente), ellas cobraban de media 497,33 euros menos que los hombres.
Así, según datos extraídos de la Seguridad Social, mientras los hombres cobraban una pensión contributiva media de 1.355,58 euros, las mujeres tan solo alcanzaban los 858,25 euros.
Para Laura Lombilla, secretaria de Empleo de CCOO Cantabria, “acortar estas distancias, y reducir la brecha es uno de los objetivos que tenemos marcados en el sindicato. Para ello, es imprescindible seguir avanzando por alcanzar la igualdad efectiva entre hombres y mujeres en el trabajo, lograr que las tasas de desempleo femenino no sean tan elevadas y luchar porque la equiparación salarial sea una realidad y no un espejismo como ocurre ahora”.
El sindicato también ha querido detenerse en las pensiones contributivas por jubilación, para la que es requisito tener cotizado un mínimo de 15 años y que al menos dos de ellos estén comprendidos dentro de los 15 años naturales previos a la jubilación.
En este caso, los hombres jubilados suponen el 62,25% del total (55.644), cobrando una media de 1.474,58 euros, mientras que las mujeres, 33.743 no llegan siquiera a los 1.000 euros, quedándose en 942,09.
“Esto es el fiel reflejo de los salarios más bajos que tienen las mujeres y su atadura involuntaria a la parcialidad, que repercuten en unas bases de cotización mucho menores que las perjudican gravemente a la hora de cobrar su pensión por jubilación”, ha añadido Lombilla.
Pensiones no contributivas
Por otra parte, mujer cántabra, casada, que vive integrada en una unidad económica formada por dos y tres personas. Así es el perfil de las personas que en la región disfrutan de una pensión no contributiva y que suponen el 70,51% de los beneficiarios, con un total de 4.548 mujeres titulares de pensión, frente a 2.449 hombres (35,45%).
Esta pensión no contributiva ofrece una prestación económica, asistencia médico-farmacéutica y servicios sociales complementarios a personas que, careciendo de recursos, acrediten un determinado grado de discapacidad o sean mayores de 65 años aunque no hayan cotizado a la Seguridad Social nunca o lo hayan hecho de forma insuficiente.
“Son 4.548 mujeres pensionistas que dejan patente la profunda brecha laboral social de las mujeres, con una menor incorporación al mercado de trabajo, que, además, supone una de las principales causas de que no hayan podido generar su pensión contributiva”, ha subrayado Lombilla.