Izquierda Unida y Podemos han mantenido una reunión con el Comité de Empresa de Reinosa Forgings and Castings para conocer de primera mano las consecuencias del ERTE solicitado por la empresa y las causas que han motivado esta situación.

En el encuentro, la parte sindical estuvo representada por Julián Macho y David Varela (CCOO), presidente y secretario del comité de empresa, respectivamente, Javier Cayón (delegado del CSIF) y Mauro García (UGT). En la parte política, participaron María Jesús Gutiérrez, coordinadora de IU Campoo, y Mónica Rodero, responsable de movimientos sociales y sociedad civil de Podemos Cantabria.

Los representantes de CCOO, UGT y CSIF han trasladado a Gutiérrez y Rodero las condiciones del acuerdo alcanzado entre la parte social y la dirección de la compañía. Así, desde la parte sindical han expuesto una radiografía de la situación laboral actual de la factoría campurriana en la que las prensas de su departamento de forja permanecen paradas durante días, el departamento de fundición aborda tan solo un pequeño porcentaje productivo de lo que sus instalaciones y plantilla permiten y su acería trabaja a tan solo un relevo productivo, adaptado a nuevos horarios de trabajo, con la intención de reducir la factura eléctrica, para atender a algunos clientes que utilizan el producto campurriano como materia prima para sus procesos de fabricación.

Desde el Comité de Empresa de Reinosa Forgings and Castings han mostrado su “contrariedad” con la falta de unanimidad para abordar un Plan de Reindustrialización de la Comarca de Campoo desde el Parlamento de Cantabria, “sin interés en rentabilizar las siglas políticas por parte de ningún partido, y sí con el objetivo de mejorar las condiciones de una comarca olvidada desde hace décadas”.

Tanto Izquierda Unida como Podemos se preguntan por las “prioridades” del consejero de Industria, Javier López Marcano, el cual, afirman, “guarda silencio frente a la dura situación por la que están atravesando comarcas como la del Besaya y la de Campoo, históricamente industriales”.

Ambas formaciones dudan de que el futuro de estas zonas sea “parques acuáticos, centros de interpretación o viviendas en el planeta Marte” y abogan por el mantenimiento de aquellas industrias ya instaladas en ellas y fortalecer la captación de nuevas inversiones en este sector, ya conocido, donde ambas comarcas “ya han demostrado altas capacidades”.

Tanto desde Izquierda Unida como de Podemos instan al Gobierno autonómico a que apoye a las industrias electrointensivas de la comunidad que están pasando por momentos “tan delicados” debido al alto coste energético tanto del gas como de la electricidad, así como en la dificultad para adquirir las materias primas necesarias para sus procesos productivos, tanto por la volatilidad de sus precios, así como por la escasez de algunas de ellas.