Jornada sobre memoria y olvido en el IES Manuel Gutiérrez Aragón de Viérnoles y en el Centro Cultural Ramón Pelayo de Solares
El Instituto Manuel Gutiérrez Aragón de Viérnoles ha organizado una jornada sobre memoria y olvido para los alumnos y alumnas de 1º y 2º de artes y 1º de Sociales, con la colaboración de la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Torrelavega y el A.M.P.A del centro. Será hoy 27 de abril en el salón de actos del propio instituto.
La jornada se divide en dos partes: por un lado, la representación de la obra de teatro documental ‘De paseo’ de la Compañía Ruido Interno, trabajo ideado, dirigido e interpretado por Juan Carlos Fernández Izquierdo. A continuación, el periodista especializado en memoria histórica y derechos humanos Juan Miguel Baquero Zurita impartirá la ponencia: “El olvido impuesto: de las fosas del franquismo a la desmemoria”
Por la tarde, esta misma propuesta se llevará al Centro Cultural Ramón Pelayo de Solares a partir de las siete de la tarde, con entrada libre hasta completar aforo.
DE PASEO
‘De paseo’ es un montaje de Ruido Interno en el que el director y protagonista de la obra, Juan Carlos Fernández Izquierdo, vuelve 42 años después al pueblo de su madre, Quintana de la Serena en la provincia de Badajoz, en un viaje cargado de emoción para encontrarse de lleno con la historia de su abuelo, Pedro, fusilado junto a un grupo de vecinos y vecinas de su pueblo en la finca anexa al cementerio de la localidad.
Fue su hermano Miguel el que promovió la exhumación de la fosa en la que se encontraban sus restos. Pedro Izquierdo de la Cruz fue “paseado” al finalizar la guerra civil en la localidad extremeña de Quintana de la Serena. El concepto `de paseo’ fue usado popularmente para identificar al secuestro y asesinato en descampado de una persona. Los paseados eran sacados desde su domicilio, lugar de trabajo o lugar de encarcelamiento; estas “sacas” podían ser de una sola persona o de muchas.
Un trabajo cargado de poesía y delicadeza con el que el autor ha querido rendir un sencillo homenaje a su abuelo y también a su abuela, que después de este hecho salió de su pueblo con sus tres hijos dirección al País Vasco para no volver nunca más a su pueblo. Se trata de un ejercicio escénico para ejercer el derecho a la reparación moral y a la recuperación de la memoria personal y familiar.
La propuesta se apoya en las herramientas de proyección vídeo habituales usadas por Ruido Interno, en este caso con mayor sentido si cabe debido al carácter documental de la pieza. Los vídeos usados en la representación, grabados en el campo de concentración de Castuera con el asesoramiento del historiador Antonio D. López Rodríguez y en el lugar en el que se encontraba la fosa común en donde se exhumaron los restos, cargan de emoción dos momentos del trabajo. La pieza incluye declaraciones de la madre del director y material fotográfico aportado por la familia Izquierdo de Quintana de la Serena.
Este trabajo se estrenó en octubre de 2019 en Santander en el Festival de Teatro Exprés, en 2020 fue seleccionado en la XXIII edición de la Feria de Teatro de Castilla y León en Ciudad Rodrigo (Salamanca) y en la programación teatral de los cursos de verano de la U.I.M.P en 2021.
JUAN MIGUEL BAQUERO ZURITA
Periodista, freelance, especializado en Memoria Histórica y Derechos Humanos, es colaborador habitual de medios de comunicación como Público y elDiario.es.
Juan Manuel Baquero Zurita es autor de ‘El país de la desmemoria’ (Roca Editorial), un relato periodístico contra el olvido en el que utiliza nuevos testimonios, incontables datos y sincera pasión para denunciar la estrategia de terror desencadenada por Franco desde que dio el golpe de Estado contra la República hasta su muerte. Y da cuenta de lo muchísimo que queda por investigar, y por juzgar, sobre las víctimas del franquismo en este país que no quiere hacer frente a la verdad.
En su prólogo, Baltasar Garzón escribe: «me conmueve el niño Alejandro cuya historia cuenta al inicio este libro; le dijeron que cuando los aviones bombardearan se tirase a la cuneta y tapara su cuerpecito con una manta. Como ese niño real, nuestra sociedad se ha cubierto durante todos estos años con una frágil colcha que, al ser retirada, deja ver la cara fea de un régimen franquista que mató, hizo desaparecer, humilló, torturó y encarceló; que robó niños; que asoló con el terror para lograr la sumisión y no levantó la bota hasta bien entrada la década de los 70.»