La Concejalía de Urbanismo ha organizado una nueva edición del “Paseo de Jane”, iniciativa que a pesar de la pandemia del COVID-19, se ha organizado en 2020, 2021 y que en 2022 cumple ya su tercera edición.

Jacobs fue la primera que se enfrentó a las grandes teorías de un momento en que el prestigio y auge del coche era tal que Manhattan estuvo a punto de ser atravesado por autovías de cuatro carriles en cada dirección si, en 1958, no hubiera habido la resistencia cívica y ciudadana que la propia Jane Jacobs capitaneó frente a Robert Moses, el arquitecto entonces gestor del urbanismo neoyorquino.

Según subraya el concejal de Urbanismo, Javier Ceruti, participar en esta iniciativa desde estas premisas vuelve a ser este año, y ya por tercera ocasión “formar parte de un recorrido por una parte concreta de la ciudad, con objetivos tan potentes y a la vez tan sencillos como aprender acaso a fijarnos un poco más en lo que tenemos a nuestro alrededor, a conocerlo un poco mejor, más despacio, a escuchar cuantos sonidos ofrece la ciudad (contaminantes unos y agradables otros), a trasladar a quienes demos ese paseo juntos los conocimientos personales de cada cual sobre los lugares por donde pasemos, o a compartir el espacio cívico, la calle, con otros paseantes y gentes que vayan con nosotros o con quienes nos cruzamos”.

La edición de este año tendrá lugar el 7 de mayo partiendo a las 12:00 horas del Centro Cívico de Tabacalera en la calle Antonio López, 36. Este Centro Cívico es un nuevo equipamiento municipal para el entorno del barrio de Castilla-Hermida en una calle recientemente acondicionada con el derribo de los tinglados portuarios que la cerraban hacia el sudeste y su nueva urbanización.

El paseo se dirigirá hacia el Poblado Pesquero, un grupo de viviendas para pescadores que se ancla en la mitad del siglo XX, que mantiene aún hoy su sabor tradicional y que también ha recibido acciones de mejora en los últimos dos años, tanto en pistas deportivas como en el acondicionamiento de sus nuevos jardines. Por la calle de la Armada Española y atravesando Varadero y las calles Castilla y Marqués de la Hermida, el paseo avanzará hasta la pasarela sobre la playa de vías ferroviaria, donde será posible contemplar ese espacio ahora mismo en discusión en cuanto a cómo abordar su transformación urbana y urbanística, y para el que la pasarela es el mejor lugar para conocerlo y apreciar su extensión y su valor urbano.

El ascensor permitirá elevar el paseo hasta la cota de la calle Duque de Ahumada y el entorno de la antigua Prisión Provincial, hoy gran estacionamiento de vehículos en superficie sirviendo a la zona de la actual calle Alta. De vuelta hacia el centro de Santander se llegará al edifico del antiguo Hospital de San Rafael, hoy Parlamento de Cantabria, inmediatamente enfrente del antiguo convento de las Clarisas de la Santa Cruz. Ambos edificios son Bienes de Interés Cultural y están unidos por el mismo entorno de protección patrimonial en lo cultural y en lo arquitectónico.

El convento de las Clarisas casi anticipa el cierre del círculo, puesto que jalona el paseo con un edificio que en su día tuvo un uso relacionado también con el tabaco y su manejo, como el que fue punto de inicio del recorrido. A continuación, se avanzará hacia el Parque del Agua, otro de los miradores de esta zona alta de la ciudad con exposición sur y buenas condiciones de soleamiento, desde el que tanto las traseras de la zona del Arrabal de Fuera como la inmediata playa de vías ferroviaria son perfectamente visibles en su colindancia.

La Rampa Sotileza, última etapa del recorrido, es otro de los elementos patrimoniales de notable interés en la ciudad que, oculta hoy tras los edificios de la calle Cádiz, muestra peor su papel de indudable y necesario conector entre la parte alta y la baja del centro y núcleo de la villa y ciudad de Santander.