Divulgadores de la historia de Santander y cántabros con protagonismo en América, en la propuesta de Ciudadanos para sustituir las calles que ensalzan nombres del franquismo
Que las calles no son simplemente un escaparate de la historia –argumento dado hasta el agotamiento para justificar que Santander haya llegado a sumar hasta una treintena de nombres de la dictadura franquista, en una desproporción frente a otros períodos más largos o relevantes—era una evidencia que prueba la propia experiencia: desde que los nombres se pidan a personas referentes o destacadas (ejemplo, la reciente de Vital Alsar—o el propio listado de nombres que maneja la Concejalía de Cultura (Ciudadanos) para culminar el cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica, aprobada hace casi dos décadas sin que el PP la cumpliera en su totalidad en las legislaturas anteriores.
Así, en la propuesta de nombres que se estudiará en los órganos municipales figuran, fundamentalmente, tanto personalidades relevantes para el propio estudio de la historia de Santander como marinos y otras figuras vinculadas a la llegada a América.
Por ejemplo, en torno a la calle Alta, donde se concentraban nombres que bajo la apariencia de meras referencias geográficas escondían alusiones a batallas o episodios importantes para la propaganda franquista, se agrupan en la propuesta nombres ligados al estudio de la historia de Santander.
Como el último cronista oficial, , Benito Madariaga –no sustituido– , que iría en Alto de los Leones; José Luis Casado Soto, que fue director del Museo Marítimo y figura importantísima en excavaciones como la de la Catedral, fallecido prematuramente (Belchite); los hermanos Carmen y Joaquín González de Echegaray (Joaquín, sacerdote, fue una referencia en la arqueología, compañero de Casado Soto en excavaciones), para la calle Brunete; y Miguel Ángel García Guinea, reputado arqueólogo, para Capitán Cortés.
Hay otro bloque para las transversales de Castilla-Hermida, desproporcionadamente plagadas de referencias bélicas al bando que ganó la guerra e impuso una dictadura tras impulsar el golpe de Estado militar.
Allí aparecen marinos, exploradores, y otras figuras similares, relacionadas con Cantabria, como Bernardo de Miera, Fray Silvestre Vélez, José de Bustamante, Antonio de Tovo…. O Juan de Santander, grumete vinculado a Cueto cuya figura, aparecida en referencias sin que se haya podido saber mucho más de su historia, se viene impulsando en los últimos años.
El arquitecto Valentín Lavís estaría en la calle Montejurra y Leonor de la Vega, de la estirpe de De la Vega, muy ligada a Torrelavega y Santillana, en Zancajo Osorio siendo, junto a la reina del siglo XII Leonor Plantagenet (en Sargentos Provisionales), las únicas referencias a mujeres en la propuesta, que sustituye General Dávila (militar especialmente cruento) por Paseo de Altamira –como se denomina la finca que alberga el conservatorio–, sin recuperar la denominación tradicional, aún recordada por los más mayores, de Paseo del Alta –se viene argumentando la confusión que generaría con la calle Alta- ni optarse tampoco ahí por Paseo 8 de Marzo, como había reclamado la Comisión 8 de Marzo.
El poeta José Hierro, Premio Cervantes, represaliado por su compromiso político y encarcelado, de cuyo nacimiento se conmemora el centenario precisamente este año, sustituirá a Camilo Alonso Vega, del equipo impulsor del golpe del Estado, director de la Guardia Civil o ministro del Interior, muy activo en la persecución a los guerrilleros antifranquistas en el monte (los emboscados, con referentes como los cántabros Juanín y Bedoya, que resistieron durante décadas a todo el aparataje franquista) y también en el hostigamiento general a cualquier asomo de libertades.
Noticias relacionadas:
- Cuando la aviación nazi voló sobre el Palacio de La Magdalena
- De la Plaza de Toros a la clandestinidad de Los Pinares: el «guadiana» del Primero de Mayo
- Un callejero normal para Santander
- La Universidad de Granada repara la memoria de la cántabra Aurelia Gutiérrez-Cueto Blanchard, pionera de la educación y fusilada por el franquismo
- Inaugurado en Islares el nuevo monumento a Paco Bedoya, el último guerrillero