Los sindicatos ACAIP-UGT y CSIF han celebrado hoy una concentración de protesta frente a la sede de la Delegación del Gobierno en Santander en respuesta a las recientes agresiones graves sufridas por personal de distintos centros penitenciarios españoles.

En el transcurso de la movilización, que se ha extendido a todas las sedes de la Delegación del Gobierno de aquellas comunidades autónomas con centros penitenciarios dependientes de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, una representación de ambos sindicatos se ha entrevistado con la delegada del Gobierno en Cantabria, Ainoa Quiñones, a quien han trasladado sus principales reivindicaciones.

ACAIP-UGT y CSIF recuerdan que «las últimas semanas están siendo especialmente duras en las prisiones españolas con una sucesión de incidentes de extrema gravedad y que parecen tener un mismo nexo: la dejadez de los gestores, una adecuada clasificación interior y una política de buenismo que está llevando a que los ataques sean cada vez más graves».

Los dos sindicatos recuerdan en un comunicado conjunto algunas de estas agresiones graves en centros penitenciarios de Murcia, Valencia o Madrid y critican que «en estos incidentes podemos observar como internos con perfiles inadaptados tienen un régimen de vida ordinario y desde las direcciones de los centros se ponen trabas para la aplicación del régimen disciplinario».

«A todo ello se suma la endémica falta de personal, la prácticamente nula formación que reciben los trabajadores y trabajadoras de centros penitenciarios y a un cada vez más alarmante deterioro de la atención médica penitenciarias con un déficit del 58% de médicos», agregan ACAIP-UGT y CSIF, que exigen que «estas agresiones sean consideradas atentado a la autoridad y no se salden con meras sanciones administrativas».

ACAIP-UGT y CSIF asocian las movilizaciones por las agresiones a personal penitenciario con un conflicto colectivo emprendido por ambos sindicatos «por la falta de negociación de las mejoras que se necesitan» en Instituciones Penitenciarias.

En este sentido, los dos sindicatos reivindican una retribución adecuada a las funciones que se realizan, la declaración de agentes de autoridad, formación universal, el encuadramiento en el grupo B de TREBEP (Texto Refundido del Estatuto Básico del Empleado Público) y el reconocimiento y respeto por parte de los gestores de la Administración penitenciaria.