Entienden, según manifiestan en una nota de prensa, que el esfuerzo económico que implicaron estas instalaciones está justificado siempre y cuando «funcionen correctamente y ofrezcan un servicio a los vecinos de Santander y no queden reducidas a una bonita foto el día de su inauguración».

A la FECAV, sostienen, llegan continuas quejas del funcionamiento de las rampas de la calle Vargas, averiadas con mucha frecuencia, del ascensor que comunica la calle Castilla con la calle Alta, que lleva roto varios meses, las escaleras de Antonio Mendoza, que fallan a menudo y así un largo etc.

Estas instalaciones, concluyen, «no pueden ser objeto de abandono por parte del equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Santander y exigimos un seguimiento adecuado y eficiente de su funcionamiento que se hace más necesario a medida que la población de Santander envejece».

La Agrupación de Ciudadanos Santander denuncia la complicidad de Alcaldía con la empresa adjudicataria

«Alcaldía no puede seguir mirando para otro lado con la falta de mantenimiento de las escaleras mecánicas», ha manifestado el coordinador de Ciudadanos Santander, Rafael Sebrango, que denuncia la complicidad de la Alcaldía con la empresa responsable del mantenimiento de los ascensores, las escaleras y las rampas mecánicas.

«No es algo nuevo, lo hemos visto durante una década con la empresa de recogida de basuras, con una Alcaldía que permite todo a las empresas con las que contrata, mientras que nada se les perdona a los vecinos», denuncia Sebrango. «El mantenimiento de las escaleras es un desastre y una continua tomadura de pelo a los vecinos de Santander».

Aunque es un problema generalizado desde la Agrupación de Ciudadanos Santander toman como ejemplo las escaleras del Grupo Santa Teresa, que conectan General Dávila con el centro de la ciudad, «el tercer tramo ha estado 25 días estropeado, todo un récord, que se suma a los 15 días que estuvo en junio parado el segundo tramo».

Según el contrato vigente, la adjudicataria tiene obligación de tener, de lunes a viernes, al menos dos técnicos para afrontar averías, y durante 365 días, en horario de 24 horas, un servicio de atención de llamadas. «Si se hiciera cumplir el contrato, nada de esto pasaría, pero Alcaldía no quiere molestar a la adjudicataria, prefiere mirar a otro lado y permitírselo todo, igual que han hecho durante muchos años con la recogida de basuras».

Desde la Agrupación de Ciudadanos consideran que es un problema de actitud por parte de Alcaldía «experta en inauguraciones y fotografías, pero ausente en lo que necesitamos los santanderinos, que es gestión. Esperamos que Alcaldía cumpla sus obligaciones y controle a las empresas a las que pagamos todos por un servicio que no recibimos».