Tras la reunión mantenida con la empresa Biogenera Innovación.S.L. y con algunos miembros de la Corporación Municipal del Ayuntamiento de Cabezón de la Sal el día 5 de Septiembre, Cabezón por el Clima ha emitido un comunicado en el que se muestra claramente en contra de la planta de biogás de La Tejera.

Consideran que  la empresa Biogenera Innovación SL no tiene ninguna experiencia previa en la construcción ni en la gestión de plantas como la proyectada en Cabezón de la Sal. «Es por ello que varias preguntas técnicas que hicimos a la empresa, les resultaron un tanto incómodas y no tuvieron respuestas coherentes».

A esto añaden que, en su opinión, el proyecto presentado por dicha empresa carece de información básica que garantice que está planta no va a generar olores.

Según su opinión,  en Cantabria se están tramitando este tipo de plantas de biogás bajo un truco administrativo: «La Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente está calificando estas plantas como de “Interés Social”, sin recurso posible. A pesar de que la CROTU, en su sesión de 25 de junio de 2020, acordó aprobar una guía de procedimiento y criterios para la regulación de las autorizaciones en suelo rústico, publicadas en una guía de contenidos que dice textualmente que se declararán de Interés social (y citamos) “Todas aquellas construcciones, instalaciones, actividades y usos que obtengan una previa declaración expresa de utilidad pública o interés social de la Administración sectorial competente, como ocurre con distintos equipamientos y dotaciones de ámbito local o regional (como pueden ser las residencias de mayores, polideportivos, centros de salud, museos, parques temáticos y otros análogos)».

En este sentido consideran que una planta de biogás promovida por una empresa privada no debería ser declarada de Interés Social con base a los argumentos expuestos

Este malabarismo, afirman » hace que se pueda instalar una planta de biogás en cualquier terreno rústico de Cantabria, lo que impide que los servicios técnicos de los Ayuntamientos puedan alegar urbanísticamente contra las ubicaciones propuestas por las empresas promotoras.»

Piden  a la Consejería de Innovación, Industria, Turismo y Comercio que asuma su responsabilidad ante este tipo de plantas. Se trata de una industria y no es comprensible que declare su impacto “tangencial”.También añaden que  el silencio mostrado por nuestros representantes políticos (todos), nos deja claro que esto es cosa nuestra, de los vecinos. «Y no podemos contar con ellos para temas serios».

Después de esta reunión, Cabezón por el Clima se ratifica en su postura contraria a la planta de Cabezón de la Sal. «No tenemos garantías de que se construya con la tecnología mínima para evitar contaminación y pedimos públicamente que se haga una reflexión a nivel político, municipal y regional, sobre la gestión de este tipo de plantas en Cantabria. No es de recibo que un proyecto básico, sin las garantías mínimas en temas medioambientales y de gestión, llegue al punto de tramitación de licencias en el que se encuentra la planta de Cabezón de la Sal».

Afirman que se han puesto  en contacto con otras plataformas de Cantabria para  presentar una petición al Gobierno de Cantabria para que se regulen y legislen adecuadamente este tipo de instalaciones ya que consideran que «Tal y como están planteadas en la actualidad no cumplen con las recomendaciones Europeas para facilitar la economía circular, ya que los beneficiados de la gestión de residuos y de la producción de biogás no son los productores de esos residuos (ganaderos principalmente) ni tampoco los vecinos de las comarcas donde se instalan. Pediremos que se haga una reflexión sobre este tema y se adopten modelos europeos, con plantas de menor tamaño que generen energía de autoconsumo cercanas a las granjas y a las zonas de producción»