Oscar Rodrígez Pastora gana el concurso nacional de órgano de Burgos
Hasta la final del prestigioso concurso Nacional de Órgano ‘Frnacisco Salinas- VIII Centenario Catedral’ habían llegado tres jóvenes organistas. Celia Miranda, Nadal Roig y el cántabro Oscar Rodríguez Pastora que, finalmente fue quien se hizo con el primer premio este domingo.
Nada más conocerse la noticia, las redes sociales del músico se llenaron de felicitaciones de amigos y compañeros.
Con la humildad que le caracteriza, poco después de conocerse la decisión del jurado, afirmaba sentirse muy contento para añadir que es un éxito importante para él, pero que su objetivo es seguir avanzando, estudiando y trabajando «mañana me espera ya la consagración de la primavera para estudiar. La vida sigue, no pretendo detenerme en esto», afirmaba en conversación con EL FARADIO.
SU TRAYECTORIA
Oscar comenzó a experimentar con el piano cuando, sentado en la banqueta, sus piernas todavía no llegaban al suelo. Su madre había estudiado música y esa era la razón de que en su casa hubiese un piano. Cuenta que le gustaba experimentar y probar acordes y melodías sin más, por el mero placer de ver cómo sonaba. «Para mí aquello era como un juego. Yo sentía curiosidad por saber qué se podría hacer con aquel instrumento que a mí entonces me parecía gigante. Tocaba lo que me apetecía y así se despertó una especie de inquietud de buscar y tocar cosas nuevas, improvisando. Cosas sencillas, claro», explica para el Faradio.
Terminó matriculándose en el Conservatorio Jesús de Monasterio, en la especialidad de clarinete, pero cuenta que un día fue a un concierto de órgano que organizaba el conservatorio en colaboración con la ONCE en la iglesia de San Roque («hay una larga tradición de organistas ciegos, especialmente en Francia», aclara) y entonces se despertó su interés por este instrumento. Animado por la que entonces era profesora de esta especialidad, Dolores Fernández, comenzó a estudiar órgano mientas continuaba también con el clarinete. «Del órgano me llamó la atención el hecho de que sea un instrumento tan polifacético. Puede adoptar distintas facetas, porque encaja como solista, acompañante o dentro de una orquesta».
Con 14 años Oscar Rodríguez Pastora era ya el organista habitual de la iglesia de La Compañía. Con esa edad compuso una misa solemne para coro mixto, solistas y órgano. «Pensé que igual yo podía aportar mi grano de arena para enriquecer el repertorio sacro». Dicho y hecho. El joven organista compuso su misa, aunque tuvo que esperar unos años para poder estrenar la obra.
Fue la directora de orquesta y profesora del Conservatorio Jesús de Monasterio en aquel momento, Marta Silva Pérez, la que animó a este alumno a estrenar su composición. Contactaron entonces con la profesora de Canto del centro, Maria del Mar Fernández Doval, y, en poco tiempo, fotocopiaron partituras y contagiaron la ilusión a un puñado de cantantes con los que montaron un coro integrado por jóvenes compañeros de conservatorio de Oscar, profesores del centro, ex alumnos y coralistas con dilatada trayectoria en distintas agrupaciones de la región. Así fue como la misa solemne en Fa de Rodríguez Pastora se estrenó en 2018 en la Iglesia de Santa Lucía y poco después se volvió a interpretar en la iglesia de la Compañía con sus cinco números: Kyrie, Gloria, Credo, Sanctus y Agnus Dei.
Ese mismo año, Oscar terminó el grado profesional en las especialidades de clarinete y órgano y después siguió estudiando el grado superior en Musikene, donde el curso pasado obtener el título con un 10 en el examen de interpretación y otro 10 en el trabajo fin de estudios: una transcripción para órgano de la Cuarta Sinfonía de Robert Schumann. «Han sido unos años maravillosos en los que he aprendido mucho y he conocido a compañeros con los que he compartido grandes momentos», cuenta.
Además, ha comenzado los estudios de Dirección de Orquesta y Coro en el mismo centro con los profesores Arturo Tamayo y Basilio Astúlez.
Recientemente ha puesto en marcha la Orquesta Barroca de Alumnos (OBA), con el objetivo de hacer conocer la interpretación históricamente informada entre los alumnos de Musikene. También ha colaborado con algunas instituciones musicales como el Coro Easo, el Orfeón Donostiarra, la OSE (Orquesta Sinfónica de Euskadi) o la BOS (Bilbao Orkestra Sinfonikoa).