Unidas por Santander (UxS) denunciará de nuevo en el pleno la situación de “descontrol” que vive la ciudad de Santander en materia de ocio nocturno, que lleva mucho tiempo suponiendo un grave trastorno a la vida de los vecinos.

“Vamos a trasladar al pleno las denuncias y quejas vecinales que hemos recibido recientemente, especialmente en la calle Santa Lucía, y en la intersección de esta con la calle Moctezuma, y en otro establecimiento ubicado en la calle Ataulfo Argenta, próximo a la plaza de Puerto Chico”, ha adelantado el concejal de la formación, Miguel Saro.

Saro ha destacado las molestias que están sufriendo los vecinos “debido al especial y excluyente uso que hacen de sus calles estos establecimientos de hostelería”, y cuyos problemas de orden público asegura que el Ayuntamiento “conoce de sobra”.

“Estamos hablando de problemas de seguridad y de perturbaciones al derecho al descanso, que se ven continuamente alterados, ya que el Ayuntamiento incumple sus obligaciones de inspección para mantener las correspondientes licencias y autorizaciones de cualquier establecimiento de hostelería, y estas actuaciones superan con mucho lo permitido en las licencias”, ha denunciado Saro.

De hecho, el edil ha explicado que “el desarrollo ineficaz” de esta competencia municipal se debe “a la insuficiencia de medios de los servicios competentes de la dicha inspección, principalmente los servicios de Policía Local, Medio Ambiente y, especialmente, Ingeniería Industrial”.

Saro, que ya ha denunciado con anterioridad la ausencia de medios y personal de estos servicios, reclamará de nuevo al equipo de Gobierno que habilite los medios personales y materiales en el plazo mínimo posible para que puedan ejercer sus labores de inspección y control en tiempo y forma.

En cuanto a los casos denunciados, y que diferentes vecinos han trasladado a UxS, destacan el de un establecimiento de hostelería situado en la calle Santa Lucía, y en la intersección de esta con la calle Moctezuma. “Ha habido diversos altercados provocados por los clientes de un establecimiento de hostelería situado en las cercanías que dificultan en enorme medida la convivencia con los residentes de la zona, hasta el punto de que algunos de estos deben esperar a la llegada de la policía nacional y local, que debe estar presente habitualmente en la zona, para poder abandonar su vivienda y usar la vía pública para desplazarse a su centro de trabajo a primera hora de la mañana”, ha explicado Saro.

Por otro lado, desde la formación se tiene constancia de múltiples denuncias de madres y padres de jóvenes, algunos de ellos menores, que acuden a otro establecimiento de ocio nocturno que se encuentra en los últimos números de la calle Ataulfo Argenta y próximo a la plaza de Puerto Chico. “Debido a la ausencia de control alguno de su aforo, ha habido algunos episodios de mucho peligro para sus clientes, en la mayoría, como digo, muy jóvenes”, ha revelado Saro.