Carmen G de la Cueva llevaba años manteniendo conversaciones mentales con escritoras como Carmen Martín Gaite, Carmen Laforet, Elena Fortún…. pero fue tras nacer su hijo y separarse cuando decidió plasmar en un libro todo eso que sucedía en su cerebro. «Había dejado de escribir, estaba en un momento de desconfianza, de inseguridad, de incertidumbre económica… pensé en otras escritoras que habían vivido situaciones similares y que siguieron escribiendo tras ser madres». Ese fue el punto de partida que culminó con la publicación de ‘Escritoras, una historia de amistad y creación’ que se presenta este jueves en la librería Gil de la plaza de Pombo a las 19:00 horas.

Hubo un momento en España en el que todo parecía posible para las mujeres: estudiar, salir de sus casas, tejer hilos de amistad y plantar una pequeña semilla que, a pesar de la guerra y de la posguerra, germinó en poemas, libros y cartas. Una historia que transcurrió en entornos como la Residencia de Señoritas o el Lyceum Club Femenino, que seguiría a menudo en el exilio, y que entrelaza las vidas de creadoras como Emilia Pardo Bazán, Carmen Baroja, María Lejárraga, María de Maeztu, Victoria Kent, Elena Fortún, Marisol Dorao, Carmen Laforet o Carmen Martín Gaite.

En realidad, lo que la autora refleja en la páginas de su novela es cómo todas estas mujeres, en un momento determinado de sus vidas encontraron en la voz y el amor de otras mujeres la fuerza necesaria para creer en ellas mismas. «Yo me siento especialmente cercana de las más próximas temporalmente, que fueron madres, escribieron y dejaron de escribir o vivieron momentos de desconfianza, como me sucedió a mí misma. En el caso de Carmen Laforet hubo un grn silencio entre su primer y segundo libro; Carmen Martín Gaite estaba durmiendo a su hija en la cuna cuando ganó el premio Nadal por una novela que escribiño prácticamente en secreto porque Rafael Sánchez Ferlosio, su marido, no tenía mucha confianza en lo que escribía su mujer…» son historias que Carmen G. de la Cueva repasa mientras habla para El Faradio sobre la presentación de su libro en Gil.

Un libro en el que sus textos aparecen acompañados por las ilustraciones de Ana Jarén que «han hecho que todas esas autoras de las que hablo, sean más reales para los lectores. De alguna manera, sientes su dolor, sientes su gozo. Ana Jarén ha sabido reflejar muy bien la lírica y la poesía de los cuidados y de las casas. Hay muchos detalles y mucha belleza en su trabajo», explica la autora.

El hijo de Carmen ya tiene cuatro años y hace dos que se separó. Mientras promociona este libro, ya tiene en mente el siguiente que tendrá la maternidad muy presente pero sobre el que no cuenta mucho más.